www.zonamovilidad.es
Por Pilar Bernat
x
pbernattelycom4com /7/7/16

Escucha la noticia

Hace 75 años, en plena Guerra Mundial, el ejército americano planteó un reto a los fabricantes de automóviles y les dio mes y medio para presentar propuestas para un vehículo ligero, con tracción a las cuatro ruedas, que se pudiera utilizar en los múltiples desempeños militares. El apresurado concurso se adjudicó a Bantam; pero el fuelle económico de la pequeña empresa le impidió cubrir las necesidades de unos generales agobiados ante el avance de Hitler y sus aliados del Eje. Fue entonces cuando Ford y Willys-Overland, el fundador de Jeep, entraron en juego y, en consecuencia, cuando nació el mito de un vehículo ‘diferente’ y un nombre que se identifica con la “mayor contribución americana a las operaciones de guerra”. Un hito de la historia de la automoción.

Y si todo el mundo sabe que hoy Jeep pertenece al grupo italiano Fiat, no es un hecho tan conocido que la marca, con motivo de sus bodas de platino, ha sacado una serie conmemorativa. Y es precisamente el modelo Cheerokee 75 aniversario el que hemos probado. ¿Cómo se identifica? Pues, a simple vista, por el logo que lleva en la puerta; pero también por la gama de colores (en este caso verde Recon), por los detalles en bronce en las piezas metálicas, el techo solar panorámico ‘CommandView’ y lo que motiva, especialmente, este reportaje: los sistemas de seguridad y conducción asistida y la plataforma ‘Uconnect’.


Otras características especiales incluyen los faros antiniebla y la iluminación delantera con sensores de luz, de forma que se enciende o apaga de forma automática; llantas de aluminio de 18” con cinco radios y sistema de control de presión para garantizar el correcto inflado de los neumáticos o la tapicería de cuero con costuras en resalte y asientos regulables de ocho posiciones con apoyo lumbar y configuración personalizable. En cuanto a la mecánica: motor turbodiésel 2.2 MultiJet II de 200 CV, cambio automático de nueve velocidades y sistemas Jeep Active Drive I y Jeep Active Drive II

Conducción asistida

Ya en términos de tecnología inalámbrica, conectividad y entorno digital, en general, hay que empezar por la propia llave, la cual ofrece sistema de entrada y arranque KeylessEnter’n Go; o dicho de otra forma, llave de detección de cercanía con apertura instantánea y encendido por pulsación. Portón trasero eléctrico y alarma antirrobo.


Una vez sentados, es fácil comprobar que el retrovisor interior es fotosensible, que los exteriores disponen de plegado eléctrico o que el parabrisas incorpora sensor de lluvia; pero también que esta edición de Jeep, como hemos mencionado antes, incluye una pantalla TFT táctil de 8.4 pulgadas, instalada en la consola central. En ella constatamos que el 4x4 nos ofrece sistema de audio manos libres y conexión Bluetooth con el teléfono móvil u otros dispositivos, que los controles de climatización sectorial del vehículo son digitales; volante incluido o que tiene, como no, navegador GPS pero, con contenido 3D (hay que hacer zoom para apreciarlo).

El 4x4 nos ofrece sistema de audio manos libres y conexión Bluetooth con el teléfono móvil u otros dispositivos, que los controles de climatización sectorial del vehículo son digitales; volante incluido


Así mismo, el cuadro de mandos frontal, aЬn analógico en la mayoría de los vehículos en circulación, es, en el caso del Cherokee 75 aniversario, digital. Su configuración se realiza desde un completo panel de ajustes o desde los mandos del volante y nos permite seleccionar qué y de qué forma queremos ver los datos del viaje: velocidad, marcha activa, temperatura, revoluciones, las órdenes del navegador, o, lo que es más importante, si están activados o no los sistemas de ayuda al conductor y cuáles.

Y es que, por lo que destaca un coche en 2016 es por su equipamiento en términos de seguridad y asistencia al volante; alguno de cuyos elementos hay que aprender a utilizar antes de lanzarse a la carretera, porque aportan reacciones y sensaciones que, hasta el momento no formaban parte de nuestra vida cotidiana.

Un buen ejemplo es el control de carril, del cual reniegan algunos conductores clásicos, pero que nos aporta no sólo seguridad, sino una idea clara de los que va a ser la autoconducción en un espacio breve de tiempo; ya que a través de sensores y cámaras el coche reacciona a determinados estímulos o elementos como pueda ser, en este caso, la pintura de la carretera (fundamental que esté en buenas condiciones). Así, si el control de carril está activado (pantalla de ajustes o botón central) y no pulsamos el intermitente, el volante tira para indicarnos que estamos pisando la línea o nos salimos de ella. Y lo que resulta más espectacular, si con mucha precaución soltamos el volante, el coche se mantiene y avanza dentro de su carril. Moviéndonos a través de la pantalla de mandos, vemos que el Jeep puede alertarnos, igualmente, si sobrepasamos la velocidad permitida y en este caso, el elemento externo indicador, sería la señal de tráfico en la que se estipula el límite.


El mismo panel frontal del que hablábamos nos da instrucciones de arranque y parada, nos indica para cuantos kilómetros tenemos combustible o nos permite marcar, mediante el limitador, la velocidad a la que queremos circular; instrumento que combinado con la mencionada detección del carril, el de mantenimiento de la distancia con el vehículo delantero o la localización de obstáculos y frenado automático nos transporta, una vez mЗs, a ese mundo en el que, una vez preparadas las ciudades y dictadas las leyes y normas oportunas, nos subiremos al coche y disfrutaremos tranquilamente de nuestro trayecto escuchando música, trabajando o incluso disfrutando de contenidos audiovisuales.

Hoy, los fabricantes hablan aЬn de sistemas de prevención de accidentes y, además de lo que hemos destacado, incluyen el detector de ángulos muertos, el control electrónico de estabilidad o la cámara de visión trasera con líneas dinámicas, la cual no sólo facilita las maniobras marcha atrás, sino que nos alerta de cualquier obstáculo invisible para quien está al volante.


Sí empieza a ser conocido, gracias a la publicidad, la ayuda al aparcamiento; en este caso, tanto en paralelo como en batería. Este capricho de la casa Fiat, cuenta con una plataforma de gestión, Park Sense, que combina diferentes activos del coche, de forma que detecta huecos y dicta las indicaciones para aparcar en los sitios más inverosímiles. Para quienes no han vivido la experiencia, recordar que el acelerador y el freno se mantienen bajo nuestro control porque cuando el vehículo realiza la maniobra de forma tan rápida como precisa y sentimos que es el automóvil el que nos maneja a nosotros y no al contrario, la adrenalina se dispara.

Audio y voz excepcionales

Más allá de la increíble experiencia al volante, hay que mencionar dentro del ámbito tecnológico, que en el panel central podemos encender la radio, la cual nos ofrece múltiples modos de sintonización (FM, AM, MW, LW, SW, DAB, DAB+ y DMB). De la misma forma si pulsamos el enlace de ‘medios’ podemos acceder a las fuentes auxiliares, bien sea celular, reproductor, disco o tarjeta de memoria y si nuestra opción es teléfono, por todos es conocido que entran en juego los comandos de voz, los mandos en el volante y una gestión inteligente que accede a nuestros contactos, mensajes, etc. del teléfono móvil (volveremos sobre ello más adelante). El puerto USB para carga y conexión, la cuna de la tarjeta SD y la salida para auriculares (3.5 mm), se sitúan en la zona baja del panel central junto al mechero.


Mención aparte merece el equipo de audio, nítido a la hora de transmisión de voz o de compresión del asistente; pero excelente para lo que hasta ahora ha sido su misión principal: la reproducción de música. Así, en la pantalla de ajustes, se puede configurar el equilibrio/atenuación, el ecualizador, el volumen -conforme a la velocidad-, la compensación de volumen Aux y el sonido envolvente; que, cuando está encendido produce el efecto del ‘cine en casa’ de forma que las notas surgen de cualquier parte.

Por lo demás, los mandos, los cambios de pista, la bajada o subida de volumen, son los habituales y no requieren mayor explicación.


Un icono de un teléfono nos sirve de acceso al sistema de telefonía integrado; el cual tiene dos facetas: la legal de emergencias, aún fuera del alcance del propietario del coche, con una e-sim que se encarga de enviar las llamadas de emergencia (en próximas generaciones tendrá muchas más aplicaciones) y la de uso común de los teléfonos conectados a través de Bluetooth mediante un sistema de reconocimiento muy sencillo. Lo cierto es que funciona con bastante precisión.

Por lo demás, el navegador es el encargado de llevarnos con órdenes precisas al lugar del mapa indicado, de alertarnos si hay radares y de contarnos qué tenemos en nuestro entorno mediante puntos de interés. Con todo configurado te pones en marcha y empiean las sensaciones: comodidad, autonomía, seguridad, firmeza.

Dicen que Jeep nació para la aventura y eso fue lo que vivimos…

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios