A nadie le resulta extraño a día de hoy leer al final de un correo electrónico una frase como “Enviado desde mi Android” “Enviado desde mi Blackberry”… no sería la primera estrategia que los Smartphone copiarían de Apple, pero sí una de las más significativas.
El hecho de que el iPhone se considerara un objeto innovador, único y absolutamente exclusivo determinó que tener uno era un mérito digno de compartirse. Desde entonces, las compañías han decidido que la forma de que el usuario sepa que su móvil de último modelo es algo de lo que debe presumir.
Además, según un estudio Journal of Applied Communication Research, a los usuarios que firman los correos con un "Enviado desde mi..." se les perdonan las faltas gramaticales u ortográficas.
Si (
No(
