Las prácticas de Amazon, bajo vigilancia en EEUU

El escrutinio legal al que se enfrenta Amazon ha aumentado en los últimos días, debido a que diversas compañías han sido interrogadas sobre los servicios web de la multinacional. Las investigaciones estarían buscando probar si Amazon está dañando a sus rivales con prácticas que puedan reconocerse como competencia desleal.

La Comisión Federal de Comercio es una agencia independiente del gobierno central de los Estados Unidos de América, cuyo objetivo principal es la protección del colectivo de clientes. Esta comisión vela por sus derechos y persigue las prácticas que atenten contra la libre competencia, y algunos de sus investigadores son los que encabezan las investigaciones contra Amazon.

¿Qué es la Ley Antitrust?

La Ley Clayton Antitrust es una ley federal estadounidense en contra de las prácticas empresariales que dirijan el mercado hacia un monopolio en determinado sector. La ley fue aprobada en 1914 como mejora de la Ley Sherman Antitrust.

Como su propio nombre indica, la investigación bajo esta ley en contra de la confianza del mercado podría indicar que la Comisión Federal de Comercio investigue sobre si Amazon tiene tejida una red que recuerde un monopolio en lo que a comercio online se refiere. Aun así, no necesariamente sería castigada la compañía por la investigación, que sigue su curso.

La importancia de AWS

Amazon Web Services tiene un dominio casi absoluto sobre el mercado de servicios e infraestructura en la nube. Su cuota de mercado es de un 48% frente a su más cercano competidor, Microsoft Corp.’s Azure, que posee un 16%, según un estudio realizado por Gartner Inc.

Uno de los temas que la Comisión Federal de Comercio investiga es la posibilidad de que Amazon discrimine a compañías de software que vendan sus productos a clientes de AWS, mientras que al mismo tiempo compiten con Amazon. Esto significa que Amazon podría castigar a compañías que trabajen con otras plataformas en la nube en favor de las que trabajan con ellos exclusivamente.

Varias compañías dependen de los servicios online de Amazon para distribuir sus productos, pero a la vez los mismos compiten con la multinacional estadounidense, lo cual, según la crítica supone un peligro para la libertad del mercado.