La situación de colapso ha obligado al Consejo General del Poder Judicial español a elaborar un plan de choque para afrontar la situación tras el fin del estado de alarma. En este texto se establecen una serie de medidas a implementar para afrontar este escenario y uno de los bloques busca la implementación de medidas tecnológicas que permitan una mayor flexibilidad en las actuaciones procesales en la búsqueda de una tramitación más rápida que evite las ralentizaciones.
“En los últimos años hemos experimentado mejoras sustanciales en sistemas como Lexnet y parece que cala la idea de que el Covid-19 puede servir como acelerador en la transformación digital, pudiendo aplicarse la tecnología en temas que deben modernizarse”, asegura Ignacio López, analista de Negocio Emergente de la consultora Paradigma. Entre estos temas, destaca “el establecimiento de la fecha y hora de las vistas o trámites equivalentes (donde la IA puede ser de utilidad en la fijación de preferencia de determinados asuntos), el establecimiento de bases de datos predictivas para facilitar la consulta y deliberación de los jueces y la oficina judicial, la mejora del Punto Neutro Judicial en la investigación patrimonial (extendiéndose a bienes del ejecutado indirectos o a bienes de personas vinculadas, fiscalizando la distracción del patrimonio de modo efectivo) o el fomento de la interoperabilidad entre los sistemas de gestión procesal de las distintas Comunidades Autónomas, al tener cada una la suya propia entre otras propuestas”, explica López.
Blockchain e IA, tecnologías claves
Entre las tecnologías que serán clave para transformar digitalmente la justicia, los analistas destacan principalmente la tecnología Blockchain y la Inteligencia Artificial. Blockchain destaca por sus características de inmutabilidad o menor facilidad para alterar la información.
Sin embargo, más allá de las capacidades que permitirán la tecnología Blockchain para proteger los documentos, la Inteligencia Artificial es la tecnología que más va a revolucionar este sector, al menos según los analistas de Paradigma Digital.
“Respecto a los abogados la IA, les permite ya diseñar su estrategia procesal, hacer perfilado de los jueces y determinar sus probabilidades de éxito a la hora de recurrir y, por ende, no interponer recurso si la probabilidad de ganar es baja. Por tanto, dependiendo de cómo el abogado utilice esta tecnología podríamos hablar de una mayor o menor sobrecarga en los tribunales” apunta López.
Algunas propuestas más futuristas señalan incluso que la IA podría sustituir en los casos más sencillos a los jueces
Asimismo, también puede ser una herramienta de utilidad para jueces y magistrados ya que puede reducir la complejidad en la resolución de asuntos judiciales, ya que permite acelerar los procesos de búsqueda, localización y examen de datos electrónicos, detectando tendencias y patrones en documentos voluminosos.
Algunas propuestas más futuristas señalan incluso que la IA podría sustituir en los casos más sencillos a los jueces, con una mayor rapidez y un menor margen de error. En estos casos, los jueces podrían ser algoritmos preprogramados que actuarían como bots.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que, en España, actualmente, la potestad de juzgar y hacer ejecutar lo juzgado corresponde a los jueces y tribunales (según el artículo 117 de la Constitución), por lo que habría que llevar a cabo cambios en esta norma para poder implantar a fondo estas soluciones.
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