El regulador europeo llevará su caso al máximo tribunal de Europa ya que no están de acuerdo con la decisión que anulaba el veto ante la oferta de 10.300 millones de libras de CK Hutchison por la unidad británica de Telefónica, O2 UK. De este modo, el regulador de Competencia de la Unión Europea apelará de esta forma al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (CJUE).
La cuestión es que la Comisión Europea no pudo demostrar que el acuerdo de 2016 dañaría la competencia o haría subir los precios de los servicios de telecomunicaciones.
“La Comisión considera respetuosamente que en estas cuestiones el Tribunal General cometió una serie de errores de derecho"
En esta línea, la portavoz de la Comisión Europea, Arianna Podesta, ha señalado que “la sentencia del Tribunal General planteó importantes cuestiones jurídicas, como la prueba jurídica para los casos de ‘gap’ (las fusiones que generan preocupación y dudas a pesar de no ser empresas dominantes), el papel de las eficiencias, el nivel de las pruebas, el valor de la evaluación económica de la Comisión y los límites del control judicial del Tribunal General”.
“La Comisión considera respetuosamente que en estas cuestiones el Tribunal General cometió una serie de errores de derecho y pide al Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas que anule la sentencia del Tribunal General a este respecto”, ha asegurado Podesta.
La decisión del regulador europeo fue un revés para el organismo de control de la competencia de la Unión Europea que aumenta las posibilidades de flexibilizar las fusiones destinadas a compartir las inversiones para el despliegue de la 5G.
Sin embargo, con esta apelación la decisión se puede alargar durante varios años. Asimismo, la sentencia puede tardar varios años.
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