Quedan pocos días para dar por finalizada la campaña electoral. En esta carrera por ganar votos, los partidos políticos utilizan todas las técnicas a su alcance con el objetivo de llegar a los votantes e intervenir en su intención de voto. En este contexto, el Big Data ha ido ganado puntos desde las elecciones de 2012 en EEUU como una tecnología que permite mediante el análisis de datos conocer mejor al electorado y dirigir los mensajes con un alto porcentaje de éxito.
El Big Data ha ido ganado puntos desde las elecciones de 2012 en EEUU
Gracias a la compañía española Tinámica, experta en Big Data, hemos identificado una serie de prácticas realizadas por los partidos políticos, usando el Big Data a su favor durante esta campaña electoral.
Predecir el comportamiento del electorado
Las técnicas estadísticas tradicionales han dejado de ser una garantía de los resultados electorales reales y están siendo sustituidas dentro de los partidos, de forma progresiva, por sistemas de analítica avanzada. Estos sistemas, especialmente en la etapa final de la campaña electoral o ya en la mesa electoral, permiten incrementar el porcentaje de acierto de las predicciones de resultados. De este modo, con técnicas de Big Data y la técnica de "aprendizaje en proporciones", las maquinarias electorales de los partidos políticos disponen de encuestas muchos más científicas y afinadas.
Conocer mejor al electorado
El análisis de datos permite tener un conocimiento mayor tanto de los perfiles fieles a un partido, como de los potenciales, teniendo en cuenta factores tales como: si se abstuvieron en las anteriores elecciones, los asuntos que les preocupan, la zona en la que viven o los contenidos que publican en las redes sociales. Toda esta información permite establecer perfiles de electores más concretos y detallados, delimitar de forma más clara sus demandas y establecer objetivos de "acercamiento" o fidelización, así como tener información detallada de su área de influencia.
EL Bid Data permite a los partidos políticos concer mejor todos los perfiles de votantes
Potenciar la comunicación y la interactuación digital
Las campañas son una auténtica carrera de obstáculos en las que un mínimo movimiento en falso hace a un candidato naufragar, independientemente de que exista un programa razonable y un sólido equipo detrás. En este sentido, tanto la comunicación e interacción digital como la proliferación de debates y vídeos por la red suponen un match ball que impacta en las intenciones de voto, y que todos los partidos tienen bajo control. El uso de las técnicas de Big Data permite generar y estructurar los contenidos de forma más adecuada, hacer un seguimiento exhaustivo de la repercusión e interactuar de forma directa con los electores y potenciales.
Mejorar la escucha-participación de los ciudadanos
La participación ciudadana ha evolucionado en los últimos años y se ha trasladado en buena parte a las redes sociales, por lo que realizar un seguimiento de los comentarios y contestar a las peticiones de información de los ciudadanos abre y extiende las vías de comunicación entre partidos políticos y ciudadanos.
Personalizar los mensajes
El análisis de datos (perfiles de usuarios, demandas, intención de voto, contenido compartido en redes sociales, localización, etc.) se utiliza para elaborar mensajes y llegar de forma más directa a la ciudadanía y a los diferentes targets con los mensajes adecuados. De este modo, se puede personalizar y orientar el mensaje de forma granular. Con soluciones de Real Time Decisión y Visual Analytics se adaptan los mensajes que más impacto tienen según perfilado de clientes, segmentos y geografías, logrando así mensajes y campañas particularizadas para lo que quiere escuchar cada ciudadano. 6. Predecir necesidades y situaciones: con técnicas de Big Data es posible detectar patrones de conducta de cada clase nominada de proporciones y predecir su comportamiento. Este hecho permite afinar con las predicciones, anticiparse a lo que puede pasar y plantear posibles soluciones a conflictos o situaciones polémicas.
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