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Por Pilar Bernat
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pbernattelycom4com /7/7/16
sábado 09 de abril de 2016, 10:00h

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Son muchos los impactos informativos que nos ha dejado el MWC 2016, ese del que, una vez más, hay quien dice que no generó grandes titulares; pero que, por el contrario, nosotros vimos lleno de detalles. Al pódium: LG, ZTE y Alcatel. El paraíso: Huawei. La oportunidad: los operadores. La admiración: AT&T.

Cuando se llevan encima 15 Mobile World Congress (antes 3GSMA), se adquiere cierta capacidad para observar la feria en términos generales, se ven sus detalles, se aprecia su evolución y se es capaz de adivinar dónde están los puntos calientes. Y si bien son muchos los que la llaman “la feria de los móviles”, el Congreso es mucho más que eso y sus titulares suelen venir de la mano del progreso y no siempre del móvil más cacareado.

El desarrollo de los servicios, es donde actualmente se vive una oportunidad, la agregación de bandas, la expansión de la fibra óptica y, el tráfico de datos, masivo y creciente, amén de la consolidación o del mercado único aporta un renovado impulso a los negocios de los operadores

El momento de los operadores

Poco a poco, la industria avanza en el desarrollo de infraestructuras hacia la 5G y se pueden ver demos aquí y allá, aunque, por mucho que insistamos, es probable que hasta que no esté completa la versión 16, en el año 2020 (ese en el que también se habrá debido cumplir, en cada país miembro, la Agenda Digital Europea) no tendremos una quinta generación de telefonía móvil de pleno derecho. Y cuando decimos 5G hablamos de ausencia de latencia, de inmediatez, de interconexión instantánea entre máquinas y de sembrado de sensores; con todo lo que eso supone en el desarrollo de servicios para los seres humanos.
Y es justamente ahí, en el desarrollo de los servicios, donde actualmente se vive una oportunidad y ésta llega de la mano de unos operadores que, más allá de sus peleas regulatorias o de la guerra de tarifas, han demostrado entender su momento y que la agregación de bandas, la expansión de la fibra óptica y, el tráfico de datos, masivo y creciente, amén de la consolidación o del mercado único (no sé si lo veremos) aporta un renovado impulso a sus negocios.
Pero si la Geolocalización Multisectorial de Telefónica, ‘el invento’, promete ser mucho más productivo de lo que de la presentación se desprenderá, Vodafone piensa embarcar las antenas en los automóviles mediante CrowdCell (en comunicaciones críticas ya lo tiene Motorola) y Orange demuestra su capacidad de red sumándose al ‘must have’ de la feria: la realidad virtual. Sin embargo, AT&T -sí, AT&T- despertó el máximo interés con un stand atendido por los directivos y los responsables de producto, donde igual se podía ‘ver’ como fluyen los datos en el mundo, subir a un coche hiperconectado, disfrutar de una experiencia de realidad virtual, visitar una ciudad inteligente o soñar con la granja del futuro. El operador americano habla de expansión, de ir sin prisa, pero sin pausa y de velar por que sus clientes fuera de los Estados Unidos (su negocio, como el de BT Global es vertical) puedan disfrutar de los Ьltimos desarrollos con la máxima calidad. Lo más divertido y anecdótico, en SK Telecom.

Triunfa la gama media de un móvil que desacelera

Más allá de la red y a diferencia de lo que hasta ahora era habitual, la integración de la SIM virtual en los accesorios, los chips específicos y el desembarco del IoT invita a pensar que eso que siempre creímos que ocurriría, que el móvil sería por siempre el eje de nuestras vidas, empieza a cambiar de color. De hecho, es probable que ese sistema de pago móvil, el llavero, las opciones de indentificación o la comunicación de primera instancia se traslade a los relojes, las pulseras, las gafas, un colgante o cualquier otro complemento que nos permita rebajar el estado de esclavitud al que estamos sometidos con los smartphones. ¿Y por qué no el coche?
Tal vez, lejos de unificar, poco a poco diversifiquemos y puede que baste llevar un ‘elemento radio’ a nuestro alcance para que todo lo demás se conecte a él y cobre vida. ¿Y ese elemento tiene que ser un smartphone de 800 ó 900 euros? Pues no necesariamente.
Desde luego, lo que sí hemos visto en el MWC 2016 es que se nos acaban las razones para explicar a los lectores que, si tienen 1.000 euros, deben gastárselos en un móvil que lleva ‘dual pixel’ ‘super something’o ‘better noise cancelation sistem’; ¡Eso sí, que estén tranquilos porque les llega para la funda! Y ahí están ZTE, Alcatel, Bq, Honor o Coolpad para ponérnoslo difícil. El común de los mortales no entiende de tecnicismos y hay algunos ‘gamas medias’ que quitan el hipo. En un rango que va entre los 150 y 500 euros (gafas VR incluidas, nada de ‘covers’) hay terminales muy muy serios. Por tanto, hay que pensar en nuevos argumentos.

La innovación se llama LG y X es Sony

Y así parece haberlo entendido LG, ya que el fabricante coreano acaparó todos los titulares con su nuevo G5 modular, el cual ofrece al consumidor la oportunidad de elegir y potenciar aquello que más le gusta de su móvil: la cámara, la música, la batería… y, además, lo ha rodeado de amigos: una cómoda cámara 360 que puedes elevar en cualquier concierto, unas gafas VR (que antes de juzgar quisiéramos probar) y un divertido robot casero para vigilancia remota. Todo ello de una originalidad inusitada.
De estas ‘cosas’ y de muchas otras se habló en la feria. Aquí y allá veíamos rótulos sobre el IoT (Internet of Things); pero ver, lo que se dice ver, tocar y probar, además de asombrarnos, eso lo hicimos en el stand de un Sony, que se reinventa y aúna teléfonos y elementos inteligentes bajo un mismo concepto: ‘X’. Xperia Ear, Concept, Eye o Agent fueron algunos ejemplos. El Ear, sin ir más lejos, es un auricular capaz de leerte los mensajes al oído o contarte lo que tienes que hacer y Agent es un asistente personal para ayudarnos en el día a día.
La innovación también lució en la habitación digital de Toshiba y, por supuesto, en el rincón del grafeno, donde los circuitos se incorporaban al cerebro y todo se curvaba.

El paraíso reside en Huawei

Pero no podemos cerrar el balance MWC 2016 sin explicar que en un rincón de la feria (rincón de 6.000 m2), allá en el pabellón 1, se alzaba el paraíso de las telecomunicaciones. ¿Redes? ¿Terminales? ¿Semiconductores? ¿Soluciones? ¿Antenas? ¿Qué prefieres un café en un jardín de las delicias? Sí, efectivamente, todo lo encontrabas en Huawei, en un stand de entrada semi privada que sustituía al que siempre conocimos como ‘Taj Mahal’ y que se complementaba con otro de producto en el pabellón principal, donde los más de 100.000 visitantes disfrutaban de sus gadgets.
¿La mejor presentación? No me olvido. En algo en lo que hasta ahora Apple o Qualcomm (ninguno de los dos en feria) se llevaban la palma, Samsung consiguió deslumbrar. La presentación de su continuista Galaxy S7 y de su consiguiente ecosistema de realidad virtual demostró al mundo dónde reside el dinero y como puede aprovecharse. ¡Brutal! Pero la realidad virtual, en sí misma, lucía en las salas del stand de HTC.

4YFN

4YFN (“4 Years From Now”, dentro de 4 años) con estas iniciales se dió a conocer, algunos años atrás, el programa dedicado exclusivamente a Startups del MWCB (Mobile World Capital Barcelona). Se trata de una iniciativa que tiene lugar en la Ciudad Condal aprovechando la misma fecha del MWC (Mobile World Congress) con el fin de que los emprendedores den a conocer su negocio, amplíen su capacidad de ‘networking’ e intenten captar financiación a través de nuevos inversores.

Por su nombre es fácil deducir que sus protagonistas presumieron de negocios cuyo objeto social estará instaurado en la sociedad dentro de cuatro años pero que, hoy por hoy, son ideas disruptivas con respecto a los servicios tradicionales y arraigados en el mercado. Todos y cada uno de los sectores de la economía se viste de innovación y creatividad para convencer a los inversores y facilitar la vida de los que miramos a través de una mirilla como nuestro día a día cambia a marchas forzadas sin que nada podamos hacer para evitarlo.

2016

Parece que 2016 ha marcado la diferencia y ha conseguido presentar la mayor edición de 4YFN, con más de 400 startups y expositores nacionales e internacionales, consolidando este evento como el epicentro de la innovación tecnológica, no solo por el número de asistentes, sino por la relevancia de los mismos. Rich Miner (cofundador de Android y socio inversor en Google Ventures) y Mike Butcher (editor jefe de TechCrunch) protagonizaron la apertura de este encuentro en la que se celebraron cerca de 50 conferencias y workshops o varias sesiones de Founders&Investors (emprendedores e inversores) y en las que destacaron ponentes de la talla de Israel Ruiz (vicepresidente ejecutivo y tesorero del MIT) y Niklas Zennström (cofundador de Skype).

Telefónica Open Future

En este contexto de innovación, destacó la presencia de Telefónica quien, junto a Scytl aprovechó la ocasión para anunciar el lanzamiento de OpenSeneca, una plataforma digital a través de la cual los ciudadanos puedan debatir e interactuar de una manera segura con sus representantes electos.

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