La estrategia de Netflix supone una medida para abordar varios asuntos a la vez. Por una parte, pretende acabar con las recurrentes quejas sobre su servicio de películas, un catálogo que desde luego deja que desear en comparación a la gran variedad de series. Además, este asunto puede verse agravado con la decisión de Walt Disney de dejar de proveerle con nuevas películas para los suscriptores estadounidenses a partir de 2019.
Neflix lanzará alrededor de 86 películas originales en 2018.
Asimismo, el número de competidores que ofrecen servicios en streaming se ha intensificado de tal manera, que los precios por parte de los estudios en lo que respecta a la venta de películas también ha aumentado considerablemente.
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El "arte y ciencia" de las películas originales
Según ha informado Netflix a Reuters, disponer de un mayor número de películas de contenido propio, de momento, reporta buenos resultados: la plataforma ha lanzado en lo que lleva de año 33 películas, las cuales cuentan con más de 300 millones de visualizaciones por más de 80 millones de cuentas en todo el mundo (una audiencia media de 9 millones de espectadores por película).
Además, estas películas son la forma que tiene a la compañía de satisfacer las demandas de un público cada vez más amplio y con intereses muy variados.
"Nuestra audiencia global es cada vez más diversa. Estamos constantemente aprendiendo e intentando ser más inteligentes”, señala Ian Bricke, quien supervisa la producción y licencias del cine independiente de Netflix. “Es arte y ciencia”.
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