Los Reyes Magos ya han llegado y nuestras casas se han llenado de regalos, sobre todo, para los más pequeños. Los protagonistas, como en pasados años, han sido los juguetes tecnológicos con conexión a Internet, que los niños piden cada vez más.
Pese a que están pensados para hacer felices a los pequeños, y a los no tan pequeños de la casa, en ocasiones pueden suponer un riesgo para la seguridad de los niños al ser usados por los ciberdelincuentes.
Precisamente, el pasado mes de noviembre una conocida marca de juguetes electrónicos, VTech, anunció que alguien había hackeado su sistema. Como consecuencia, se vieron comprometidos los datos de cinco millones de usuarios de una de sus bases de datos. Como suele ser habitual, los ciberdelincuentes lograron hacerse con nombres de usuarios, contraseñas, direcciones IP… En este caso, además, consiguieron información extra: nombres de los pequeños, fechas de cumpleaños y fotos de decenas de miles de niños.
Kaspersky Lab recomienda ajustar el nivel de exposición de los pequeños a Internet
Según VTech, la brecha de seguridad habría afectado a usuarios de España, Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Irlanda, Francia, Alemania, Bélgica, Holanda, Dinamarca, Luxemburgo, Hong Kong, China, Australia, Nueva Zelanda y algunos países de América Latina.
“Vivimos en un mundo conectado, en el que los juguetes de nuestros hijos se convierten en la forma en la que los criminales acceden a nuestros datos personales. Es de suma importancia que los padres tengan en cuenta aspectos que van más allá de la diversión de sus hijos al elegir un juguete y que consideren el impacto que estos pueden tener en sus hijos y sus familiares”, ha explicado Alfonso Ramírez, director general de Kaspersky Lab iberia.
Desde la compañía de seguridad, nos recomiendan serguir estos sencillos pasos para garantizar la seguridad de los más pequeños.