En la guerra de los televisores, Samsung este año se ha preparado a conciencia para competir en todos los campos de batalla. Aumentan los tamaños, la resolución y los modelos; mejoran ostensiblemente el sonido y la calidad de imagen, así como el escalado a grandes resoluciones, ofrece 4K en paneles desde 43 pulgadas...
Así como el último experimento de comparación de paneles realizado en las instalaciones de LG a finales del pasado año resultó demoledor para Samsung, si lo vuelven a plantear ahora mismo, la sorpresa puede ser la contraria. Tal es el salto que ha dado Samsung con sus nuevos paneles full array 8K. Pero, como el contenido audiovisual se compone, como el mismo término recoge, de audio y vídeo, este año se ha esforzado también en el sonido.
Curiosamente, lo que parece una desventaja con respecto al OLED, se puede convertir en una ventaja. Una de las características de los paneles OLED es que son prácticamente bidimiensionales, apenas necesitan un par de milímetros de grosor. Eso supone que tanto la circuitería como los altavoces deben estar colocados en otra parte, no en el propio panel. Se aprovecha la parte baja o las peanas, pero, ¿qué sucede cuando lo fijas en la pared? Samsung aprovecha el grosor de sus QLED para mejorar el sonido.
El Q950TS QLED es el tope de gama de este año de Samsung, y, como seña de identidad más visible, cuenta con unos marcos diminutos que hacen que la pantalla parezca flotar y un grosor de 15 milímetros, todo un logro para un panel full array (la retroiluminación del panel procede de toda la superficie en lugar de los lados). En esos 15 milímetros los ingenieros de Samsung han sido capaces de integrar un sistema de sonido con altavoces laterales, superiores y seis altavoces traseros.
La resolución de este, o mejor estos Q950TS, ya que estará disponible en tres tamaños -65, 75 y 85 pulgadas- es de 8K. La pregunta cuando se habla de estas altísimas resoluciones (cuatro veces la de un panel 4K) es ¿qué sucede con el contenido? Si no hay contenido 8K (escasea en 4K y mucho del que dice que lo es es falso), ¿para qué quiero un televisor 8K, que, además, me costará un dineral? Por cierto, el precio no oficial arrancará para este modelo en los 6.000 euros.
La respuesta es una única palabra: escalado. Todos los televisores tienen un mecanismo de escalado para adaptar la imagen que recibe de la fuente y resolución que sea al tamaño y resolución de su pantalla. Lo que sucede cuando el televisor es de mayor resolución que la señal que recibe es que se tiene que inventar los píxeles que le faltan. Y aquí es donde entran en juego tanto el procesador de imagen como la inteligencia artificial. Mientras esta última reconoce la imagen y la compara con su catálogo, el primero se encarga de reconstruir la imagen con los más de 33 millones de píxeles por cada frame.
El Q950TS no es el único modelo con resolución 8K. El rango del pulgadas de los Q800T es más amplio, desde las 55 a las 98. Son televisores más gruesos que no cuentan con el One Connect, una caja externa en la que se concentran todos los puertos que necesita el televisor y que, a su vez, utiliza un único cable 'invisible' para conectarse con la tele. A cambio, el rango de precio es prácticamente la mitad.
\r\nPor lo que se refiere a las 4K, añade al catálogo cuatro modelos: Q60T, Q70T, Q80T y Q90T con rangos de pulgadas entre las 43 y las 85 pulgadas y precios que arrancan en los 1.000 euros.
Samsung ha dotado a sus televisores además de otras técnicas para mejorar la experiencia de ver y oír el contenido. Por ejemplo, Adaptive Picture, que analiza las condiciones de luz ambientales y del propio contenido que muestra para adecuar la luz de cada imagen en cada momento.
\r\nEl esfuerzo por mejorar el sonido se muestra en varias funciones: Active Voice Amplifier, Object Tracking Sound+ y Q-Symphony. La primera detecta cuando se produce ruido que dificulta la audición y ajusta la claridad de las voces. La segunda combina los altavoces de cada televisor para reproducir el sonido desde el lugar en el que se está originando la acción. Y la tercera es una función muy simple, pero inédita y muy eficaz: cuando se conecta una barra de sonido, no desactiva el del televisor; mantiene activos los altavoces laterales y superiores y los combina con la barra.
La nueva gama de televisores de Samsung, que se presentaron para el mercado europeo la semana pasada en Malta, irán llegando a España para principios de abril.