La reducción del envío de SMS grises, podría llegar a suponer un ahorro de unos 4.000 millones de dólares a nivel mundial y todo gracias al aumento de la implementación de cortafuegos para SMS, lo que provocaría la reducción significativa de los intentos de fraude.
La clave para paliar un problema que sigue causando pérdidas millonarias a los operadores podría estar tras la implementación de nuevas tecnologías como machine learning. Esta herramienta junto con un sistema de protección como un cortafuegos SMS, haría posible la capacidad de detectar las fuentes de tráfico fraudulentas de forma más eficiente haciendo que se reduzca esta práctica.
En el año 2027, según detallan las predicciones de este nuevo estudio, menos del 1% del tráfico de mensajería podrá atribuirse a las rutas grises si lo comparamos con el 4.3% que existe en 2023.
A pesar de ello, a medida que sigue evolucionando esta práctica, los operadores deben actuar y desarrollar nuevos sistemas de seguridad para sus aplicaciones de mensajería con el objetivo de identificar dichos fraudes y proteger a los usuarios. Según este nuevo informe, la implementación de la mensajería RCS va a jugar un papel clave durante los próximos 4 años y los operadores deben adaptar sus sistemas de seguridad a este nuevo método de mensajería.
Este informe destaca especialmente la competencia surgida por parte de los vendedores de cortafuegos con el objetivo de ofrecer soporte a los operadores con un modelo de negocio de 'Seguridad como Servicio'.
Se trata de una estrategia para el futuro desarrollo de los cortafuegos e incluye la oferta de herramientas de seguridad aplicables a una gran variedad de tecnologías puestas en marcha por los operadores. El informe predice el inicio de una carrera entre los desarrolladores de seguridad por la creación de un cortafuegos 'multiformato' capaz de detectar incluso los fraudes que incluyen inteligencia artificial.
Elish Sudlow-Poole, autora del informe afirma que "los operadores deben tener las herramientas más efectivas para identificar y mitigar los futuros métodos de mensajería fraudulenta. A pesar de ello, deben delegar este trabajo a entidades con mayor experiencia que se beneficien de la buena salud de los datos".