El despliegue de esta nueva tecnología comenzará el 1 de enero de 2026, fecha a partir de la cual todos los vehículos de nuevo desarrollo deberán estar equipados con el sistema actualizado para poder ser homologados. Además, desde 2027, ningún vehículo nuevo podrá venderse en la UE sin incorporar el NG eCall.
El problema afecta directamente a los automóviles que circulan actualmente con el sistema original. Las marcas no estarán obligadas a actualizarlos, por lo que los usuarios podrían quedarse sin un servicio que la propia UE hizo obligatorio hace apenas siete años. En Alemania, por ejemplo, ya se ha confirmado que las redes 2G dejarán de estar operativas en 2028, y que su desaparición total se producirá en 2030.
En este sentido, los expertos advierten de que millones de conductores europeos podrían verse desprotegidos en caso de accidente, ya que el sistema dejará de conectar automáticamente con el número de emergencias 112. “El apagón de las redes 2G amenaza la funcionalidad de un sistema que nació para salvar vidas”, han señalado desde el sector.
Por su parte, Bruselas justifica la transición en la necesidad de garantizar la continuidad del servicio y adaptarlo a los avances tecnológicos. El nuevo NG eCall promete una cobertura más estable y eficiente, aunque su implantación abre un debate sobre el coste y la responsabilidad de dejar fuera de servicio a millones de vehículos en circulación.