Con un peso de 311 gramos, los auriculares están pensados para el confort a largo plazo. Su diseño cerrado y circumaural proporciona un aislamiento natural, y la estructura plegable facilita su transporte en el estuche rígido incluido, junto con el cable USB-C, el cable de audio analógico y un adaptador para avión.
El corazón de los HDB 630 son sus transductores de 42 milímetros, capaces de reproducir frecuencias desde los 6 Hz hasta los 40 kHz cuando se conectan mediante USB-C. Esta respuesta extremadamente amplia permite una reproducción fiel de todo el espectro sonoro: graves potentes, medios equilibrados y agudos cristalinos. La compañía mantiene así su enfoque en la precisión y la pureza del audio, herencia de décadas de ingeniería acústica aplicada a entornos profesionales.
El soporte de códecs como aptX HD y aptX Adaptive garantiza una transmisión inalámbrica de alta resolución, minimizando la pérdida de información incluso en entornos saturados de señal. La conexión Bluetooth 5.2 permite, además, un emparejamiento estable con múltiples dispositivos y una gestión energética más eficiente.
Los HDB 630 incorporan un sistema Hybrid Adaptive ANC que analiza el entorno en tiempo real y ajusta automáticamente el nivel de cancelación de ruido. A diferencia de los sistemas convencionales, este modelo adapta su intensidad sin afectar a la fidelidad del sonido, proporcionando un aislamiento equilibrado tanto en espacios cerrados como en trayectos urbanos o vuelos.
Para la comunicación, los auriculares emplean cuatro micrófonos MEMS con tecnología beamforming, capaces de capturar la voz con nitidez incluso en ambientes ruidosos o con viento. Este sistema permite mantener conversaciones y videollamadas con calidad profesional, eliminando interferencias y priorizando la inteligibilidad de la voz.
Una de las principales novedades de los Sennheiser HDB 630 es la incorporación del transmisor Bluetooth BTD 700, un adaptador que convierte cualquier puerto USB-C o USB-A en una fuente de sonido inalámbrica de alta definición. Compatible con los códecs aptX Adaptive y aptX Lossless, el BTD 700 ofrece una transmisión sin pérdidas de hasta 96 kHz/24 bits y una latencia ultrabaja de 30 milisegundos, lo que lo hace ideal para disfrutar de videojuegos o contenidos audiovisuales sin desincronización entre imagen y sonido.
El transmisor amplía la conectividad Bluetooth del equipo al modelo 5.4, que además introduce soporte para Auracast, una tecnología que permite compartir audio con varios dispositivos al mismo tiempo, ampliando las posibilidades de uso en entornos colaborativos o domésticos.
El apartado energético también destaca: los HDB 630 ofrecen hasta 60 horas de autonomía con Bluetooth y cancelación activa activada. Su sistema de carga rápida proporciona siete horas adicionales con solo diez minutos de conexión, mientras que una carga completa de dos horas permite sesiones de uso prolongadas sin necesidad de interrupciones.
Además, a través de la aplicación Sennheiser Smart Control Plus, los usuarios pueden personalizar el sonido mediante un ecualizador avanzado, ajustar el nivel de cancelación de ruido o gestionar la conexión multipunto. La app también permite guardar perfiles de escucha para diferentes contextos, desde música hasta llamadas o entretenimiento audiovisual.
Los Sennheiser HDB 630 ya están disponibles por un precio de 499,90 euros.