No se si hay mucha gente que sepa de una ciudad que se llama Oulu. Urbe localizada en Finlandia, una de las cunas de las tecnologías móviles. No en vano de allí, de ese país, es originaria la antigua y afamada Nokia en la era del 2G y de los comienzos del 3G. Pero allí, en Oulu, su Universidad ha detallado en un informe algunas de las claves del futuro 6G. Sí, cuando aún estamos en los albores del 5G ya hay ingenieros que están pergeñando la siguiente generación de la tecnología que no me atrevo a tildar de ‘móvil’ y que empezará a ver la luz, dicen los expertos, allá por 2030.
En 2016, la ONU lanzó 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para la Agenda 2030. Estos objetivos se desarrollaron en el contexto de una población mundial en crecimiento y envejecimiento, el aumento de la urbanización y un mundo en el que el clima está cambiando. Si se cumplen, se espera que los ODS de la ONU impulsen las políticas e influyan en el gasto gubernamental en muchas economías, creando una demanda global. Se estima que la población mundial en 2019 sea de 7.600 millones de personas, y que crecerá a 8.500 millones para 2030, 9.700 millones para 2050 y 11.200 millones para fines del siglo actual. Pero es que ya en 2018 el 55% de la población mundial vive en áreas urbanas, una proporción que se espera que aumente al 68% para 2050. Para 2030 se prevé que el mundo tenga 43 megaciudades con más de 10 millones de habitantes, la mayoría de ellas en regiones en desarrollo. Sin embargo, algunas de las aglomeraciones urbanas de más rápido crecimiento son ciudades con menos de 1 millón de habitantes, muchas de ellas ubicadas en Asia y África.
Los servicios futuros, señalan, deberán estar disponibles las 24 horas, los 7 días de la semana, y de manera ubicua.
“Toda esta urbanización requerirá”, dice el informe de la Universidad de Oulu, “de servicios TIC súper eficientes, que se automatizarán cada vez más en todos los sectores para aumentar significativamente la productividad, reducir las emisiones de dióxido de carbono y generar ahorros de costes para el gasto público”. Los servicios futuros, señalan, deberán estar disponibles las 24 horas, los 7 días de la semana, y de manera ubicua. Y los servicios desarrollados para las futuras zonas urbanas deberán transformarse para satisfacer las necesidades de las zonas remotas, a menudo rurales y muy pobres, para hacer frente a los ODS de la ONU.
Será realidad en 2030
Además, al mismo tiempo y a medida que las sociedades se vuelvan más dependientes de los servicios de TIC, se volverán también extremadamente vulnerables a muchos tipos de amenazas y ataques de seguridad. “El 5G está previsto para resolver los desafíos de comunicación establecidos para 2020 y los años siguientes, pero la primera versión 5G New Radio solo cubre un subconjunto de objetivos y casos de uso”.
Según la Universidad de Oulu, con 6G se hará realidad la visión 2030 de la inteligencia inalámbrica ubicua
Según la Universidad de Oulu, con 6G se hará realidad la visión 2030 de la inteligencia inalámbrica ubicua. Si 5G se desarrolló principalmente para abordar la demanda de crecimiento de capacidad anticipada de los consumidores, así como las demandas de productividad de la industria, y para permitir la creciente importancia de Internet de las cosas (IoT), “6G requerirá un enfoque sustancialmente más holístico para identificar futuras necesidades de comunicación, abarcando una comunidad mucho más amplia para dar forma a sus requisitos técnicos”. Esto incluye identificar las tendencias, demandas y desafíos que enfrentan las sociedades futuras, así como las fuerzas globales que dan forma a nuestro mundo futuro para evitar definiciones de sistemas meramente comerciales. Si bien el desarrollo de 5G fue moldeado por las demandas de una variedad de sectores industriales verticales, el énfasis se ha mantenido en las implementaciones impulsadas por operadores de redes móviles. 6G presentará soluciones de conectividad de corto alcance súper eficientes que probablemente serán impulsadas por nuevos jugadores en el mercado, lo que dará como resultado nuevos ecosistemas fuera de los operadores de red móvil tradicionales. “Tener una visión más inclusiva fuera de los operadores móviles ayudará a dar forma a las necesidades de 6G”, rematan en Oulu.
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