Peugeot, en búsqueda de la huella de carbono neutra para 2038

Situación actual y oportunidades para la movilidad eléctrica

No se trata de un proceso fácil. Los obstáculos son muchos y difíciles de sortear. Uno de los principales es la situación actual de la red de cargadores en España, lo cual dificulta enormemente la adopción de esta clase de vehículos por parte del usuario medio, que teme no poder realizar desplazamientos con la misma comodidad que con coches tradicionales. En España hay 283 puntos de recarga públicos por cada millón de habitantes Somos el penúltimo país en este ratio, sólo superados por Grecia, que cuenta únicamente con 47. Por poner la situación en escala, el país que lidera el ranking, Países Bajos, cuenta con más de 4.700 puntos de recarga por cada millón de habitantes. Se trata de una diferencia abismal, demostrando que aún tiene mucho camino por recorrer si se quiere lograr un cambio real hacia la conducción 100% eléctrica masificada.

España es un país con mucho potencial en este campo, pues ya utiliza en gran medida las energías renovables (existen ocasiones en las que más del 51 % de la energía generada en un día proviene de fuentes limpias de emisiones de C02)

Por suerte España es un país con mucho potencial en este campo, pues ya utiliza en gran medida las energías renovables (existen ocasiones en las que más del 51 % de la energía generada en un día proviene de fuentes limpias de emisiones de C02). Esta predisposición a la utilización de energías verdes ayudará en gran medida al vehículo eléctrico a sentarse. Lenta, pero segura, la red de cargadores se va ampliando. Los puntos de recarga públicos en 2020 eran 11.000 aproximadamente. Para el 2023 se espera haber llegado a los 70.000, y para 2030 la cifra prevista son unos 340.000 cargadores, necesarios para el correcto funcionamiento de las vías plagadas de coches eléctricos.

Otra realidad de la electrificación del país es aquellos lugares en los cuales hay mayor porcentaje de vehículos eléctricos y, por otro lado, los sitios en los que la adopción de esta clase de automóviles aún es apenas anecdótica. En las grandes ciudades, como Madrid y Barcelona, el coche eléctrico ya representa una parte importante del total de vehículos que circulan por las mismas. Es en las provincias con pequeñas ciudades, así como en el entorno más rural, donde la penetración del coche eléctrico es significativamente menor. Por suerte la electrificación de estas zonas es más sencilla que en las grandes ciudades principalmente debido a la configuración de la vivienda. Son mucho más frecuentes las casas individuales de tipo chalet o adosado frente a los grandes edificios de viviendas. De esta forma se simplifica en gran medida el proceso de, por ejemplo, instalar paneles solares en el tejado del domicilio para obtener energía limpia. La mayor abundancia de garajes privados permite la instalación de cargadores para vehículos eléctricos sin necesidad de permisos especiales, los cuales si son requeridos en los garajes comunitarios de los edificios de viviendas. Además, en esta clase de poblaciones son frecuentes los desplazamientos entre urbe y urbe por lo que se realizan kilometrajes importantes. La adopción del vehículo eléctrico con la posibilidad de carga en un garaje privado en el ciclo de menor consumo energético supone a la larga un gran ahorro en gasolina y otros gastos diversos. Esto ayuda a suavizar los altos costes de acceso que aún tienen los coches eléctricos.

El compromiso Peugeot

La firma francesa ha asegurado que para 2030 todos los turismos que comercialice serán 100% eléctricos. En el camino hacia ese ambicioso objetivo, Peugeot ya ha logrado que de los 233 mil vehículos que tienen en el mercado actualmente, en los cuales el segmento C Y B combinados suman más del 80% del total, un 10% de los mismos entren bajo la categoría LEV (vehículos de bajas emisiones), que supone un incremento del 59% respecto al ejercicio anterior. El reparto de tipos de combustible de esos 233 mil vehículos es el siguiente: La gasolina representa aún la parte mayoritaria, con un 42% del total. En segundo puesto se encuentra el otro carburante tradicional, el diesel, con un 18%. En un ajustado tercer puesto se encuentran los vehículos de hibridización ligera, con un 15%. Finalmente, los híbridos e híbridos enchufables, con un 13%.

Peugeot cuenta con 12 modelos con versiones eléctricas o híbridas enchufables que abarcan todo tipo de categorías y segmentos, una de las gamas de vehículos electrificados más amplias de las que se comercializan en España

El fabricante presume de contar con el 100% de su gama de vehículos comerciales electrificada. Especialmente relevantes serán aquellos vehículos pertenecientes a última milla por las características de sus desplazamientos, y la alta probabilidad de que sean almacenados en naves por flotas, lo que facilita en gran medida la carga de los mismos. En cuanto a los turismos, el nivel de electrificación es un 80%, una cifra nada desdeñable que explica porqué Peugeot lleva siendo uno de los líderes del mercado (se sitúa en el top 3 de fabricantes) en coches de bajas emisiones durante tres años consecutivos.

Entre los más modelos eléctricos más populares y que van ayudar a la firma a lograr sus objetivos se encuentran: El e-208, que es un perfecto exponente de la estrategia de electrificación de la marca: ofrecer, en toda su gama, una alternativa “cero emisiones” sin necesidad de sacrificar aspectos importantes. El e-208, al ser eléctrico, no posee apenas ruido ni vibraciones al ser rodado. Cuenta con 100 kW (136 CV) de potencia y puede pasar de 0 a 100 Km/h en 8,1 s. Además, ofrece tres modos de conducción dependiendo de las circunstancias El “Eco” da la máxima prioridad a la autonomía que puede alcanzar los 340 Km WLTP. Por su parte, el modo “Sport” maximiza las prestaciones a costa de sacrificar autonomía, mientras que el modo “Normal” está pensado para un uso diario.

Por otro lado está el e-2008 es el SUV 100% eléctrico fabricado en Vigo. Entre sus principales prestaciones se encuentra un maletero de 434 litros, cero emisiones de CO2 y una pantalla táctil de 10 pulgadas. Para tratarse de un SUV compacto tiene 100 kW de potencia, que le permiten pasar de 0 a 100 Km/h en sólo 8,1 segundos. Su batería de 50 kWh le permite alcanzar una autonomía de 310 Km. El puesto de conducción ya clásico de la marca, el Peugeot i-Cockpit 3D posee un cuadro de instrumentos que aparece ante los ojos como un holograma, cuyas proyecciones adaptan su tamaño en función de la importancia. La pantalla táctil es también de 10 pulgadas. Cuenta además con iluminación interior, que puede mostrar hasta 8 colores distintos, que se pueden elegir y regular desde la pantalla central.

e-Sollutions y Atlante: Ampliando la red de cargadores