Aunque en el Sitges de 1967, lugar en el que abrió el primer club Pacha, no soñaba nadie con la existencia de una BlackBerry, la pasión de la saga Curve se une hoy a las tendencias del particular espíritu de quienes son fans incondicionales del sello de la cereza y se conjugan en una edición de un smartphone que, como la moda misma que representa, está hecho para sentirnos, o más bien, para dejarse tocar, ya que es el primero de la saga Curve táctil y con una actualización que nos lleva al novedoso mundo NFC.
Un equipo robusto pero sensible, con ímpetu y que intenta ser jovial. Esa es la primera impresión que otorga desde su caja de presentación el BlackBerry Curve 9380 by Pacha; disponible de forma limitada para clientes Vodafone. A diferencia de una edición normal, este lanzamiento ofrece accesorios relacionados con la famosa discoteca que ha sabido convertir en pasión su marca a escala mundial. De esta forma lo incluido en el ‘pack’ no se reserva exclusivamente al equipo y sus componentes tradicionales, sino que incorpora una
tarjeta Micro SD con contenido Pacha de 4GB; una funda en color negro personalizada con las dos cerezas en la parte trasera; pegatinas con el distintivo de Pacha; así como un altavoz, pequeño pero matón, para llevar la música a cualquier lugar. Del altavoz debemos comentar que su potencia de audio es simplemente abrumadora
para el tamaño que tiene y que responde al deseo de sus propietarios de pasar un rato de diversión en cualquier lugar, al mejor estilo Ibiza.
Curve y táctil Este modelo de BlackBerry posee una pantalla táctil de 3,2 pulgadas que aun así está asistida por el panel touchpad tradicional, el cual mantiene los comandos habituales en la marca para facilitar la vinculación al terminal de sus clientes. Llama la atención el acabado y la poca diferencia entre la pantalla y el panel, hasta el punto de que, cuando pasamos del primero al segundo intuitivamente creemos que tendremos la misma interacción, aunque la respuesta es diferente porque debemos presionar más fuerte para que estas teclas acaten la orden. Un detalle mejorable, al que sin embargo nos podemos acostumbrar con facilidad. Por cierto, es HVGA+ de 480x360 píxeles y LDC TFT en color de 24 bits. En el corazón del equipo, encontramos un procesador Marvel Tavor MG1 a 806 MHz y una batería de litio criptográfica extraíble que permite entre cinco y seis horas de conversación, 15 días en el modo de espera, 30 horas escuchando música y cinco horas y medias reproduciendo vídeo. Su memoria flash interna es de 512MB, ampliable hasta 32GB con tarjetas microSD. En cuanto a su 
conectividad, es HSDPA y UMTS, incluye GPS asistido y WiFi.
OS 7.1 con NFC Este miembro de la familia Curve viene con sistema operativo BlackBerry OS 7.1, el cual incorpora como novedad BlackBerry Tag, una función para compartir información y contenidos con la tecnología Near Field Communications (NFC); un sistema de comunicación inalámbrica, de corto alcance y alta frecuencia, que permite intercambiar datos entre dispositivos a menos de 10 centímetros. Otra novedad de este sistema operativo es el sintonizar del radio FM incorporado para escuchar las ondas locales, así como la posibilidad de que nuestros dispositivos se conviertan en puntos de acceso móvil y para compartir la conexión a Internet con cualquiera, al tiempo que ahorran batería con una configuración especial del terminal que se asigna de forma automática. Adicionalmente, incorpora aplicaciones de redes sociales, comenzando por la rediseñada plataforma Blackberry Messenger y otra social denominada Feeds, con la que podemos echar un vistazo rápido por las actualizaciones en nuestras redes sociales. También vienen de serie Twitter y Facebook.
Muy multimedia
Esta Curve tiene prestaciones multimedia tradicionales de BlackBerry, además de contar con una cámara de 5 megapíxeles con flash que permite grabación de vídeo VGA (640x580) con zoom digital de cuatro aumentos. El geoetiquetado, la detección de rostros y el estabilizador de imagen también están incorporados.
Si (
No(
