Un phablet de 5,7 pulgadas es algo muy grande. Parece poca cosa cuando lo escribes, pero cuando tienes semejante dispositivo que es prácticamente del tamaño de la palma de tu mano, logras entender la evolución de los móviles en el último año y como la tendencia a equipos grandes nos permite probar el ZTE Grand Memo versión LTE, cuyo precio libre, 399 euros (319 euros con Yoigo), es más que competitivo.
Diseño
Con una carcasa color negro opaca el estilo de este dispositivo es sobrio. Por la parte delantera la pantalla ocupa casi toda la superficie, dejando espacio para un delgado marco lateral; las tres teclas de Android en la parte inferior y la cámara en la parte superior. En el lateral derecho encontramos las teclas de ajuste de volumen, arriba el botón de encendido y la entrada jack y del lado izquierdo las ranuras para la tarjeta SIM y la microSD con tapa protectora y la entrada miniUSB para la carga.
A pesar de que el material del dispositivo es plástico, notamos que el toque mate evita que se marquen demasiado nuestras huellas, lo que elimina esa impresión que dan algunos dispositivos de estar ´sucios´. Es de resaltar que sus laterales son biselados, lo que interesa porque nos da un mejor agarre y evita que se nos resbale de las manos.
Pantalla
Las 5,7 pulgadas de este equipo cuentan con tecnología IPS de alta definición (720x1080 píxeles) en un panel multitáctil capacitivo que en sus especificaciones no advierte estar protegido por Corning Gorilla ni nada similar, lo que de buenas a primeras nos recuerda que lo mejor siempre es alejar el móvil de las llaves y evitar las caídas.
En cuanto a su reacción ante la luz, hemos de hacer notar que en exteriores tiene un comportamiento que supera bastante las expectativas. No es que nos permita disfrutar sin interferencias, pero podemos escribir y ver vídeos a pesar de la incidencia del sol sobre el dispositivo.
Ya en uso, los marcos finos dan la sensación de que la pantalla es más grande, larga y continua. Si hablamos de la respuesta táctil, la notamos muy precisa e inmediata.
Rendimiento
El sistema operativo de este dispositivo es Android Jelly Bean, no es una distribución pura, lo que nos permite contar con algunas aplicaciones de ZTE de las que hablaremos más adelante.
Este software corre sobre un procesador Quad Core 1.5GHz con memoria RAM de 2GB y almacenamiento de 16GB, expandibles a través de microSD de hasta 32GB. El equipo cuenta con conectividad WiFi, Bluetooth, MHL y DNLA, así como A-GPS, y lo mejor de todo, por ese precio es LTE, tecnología para conectarnos a redes 4G, allá donde las halla.
En nuestras pruebas hemos encontrado que el dispositivo tiene un comportamiento idóneo en la reproducción de vídeos y las ejecuciones de descargas en forma paralela. No hemos tenido momentos ´congelados´ y ha dado buenos frutos cuando hemos instalado juegos que en teoría consumen muchos recursos.
Cámara
Este smartphone tiene una cámara frontal de 1 megapíxel y una principal de 13 megapíxeles con flash LED, lo que sin dudas es un gran salto para un phablet de este precio. ZTE no ha querido quedarse por detrás de los dispositivos con los que debe combatir en este segmento, por lo que ha agregado 22 filtros diferentes, la capacidad de cambiar de sensor ISO, hacer GIF, limpiar foto, entre otras opciones interesantes para disfrutar de este elemento del equipo.
Si de la calidad hablamos hemos de decir que observamos algunas imperfecciones cuando el ambiente no es lo suficientemente luminoso, aunque en líneas generales la cámara tiene un buen comportamiento.
En cuanto al vídeo, la grabación es HD sin problemas, a pesar de que el zoom de 4x no es continuo, sino que realiza paradas casi imperceptibles, lo que supone que la imagen vaya acercándose por tramos, y no de forma fluida.
Aplicaciones nativas
Con esta versión de Jelly Bean, ZTE ha incorporado algunas aplicaciones de interés. La primera a destacar es Dolby, que nos permite habilitar un mejor sonido, un factor que ya incorporaba el ZTE Grand S Flex, pero además encontramos ‘MiFriends’, que permite conectar nuestros contactos con sus estados de Facebook y Twitter, y así ver desde la propia agenda sus últimas actualizaciones, simplemente perfecto.
Para los amantes de compartir los multimedia con otros dispositivos, ‘Full Share’ es una herramienta sencilla para enviar vídeos y fotos a la televisión u otros smartphones y tablets. Posee una interfaz sencilla y ágil.
Y por último ‘Mi-POP’, una app que habilita un botón de “atrás” en la propia pantalla que podemos colocar en donde queramos. Muy útil.
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