En un comunicado, la institución americana ha insinuado que Qualcomm ha abusado de su posición dominante como proveedor de procesadores para fabricantes de móvil al imponer términos fuera de mercado y brindar tecnologías estándar a precios desorbitados, hecho que habría debilitado a los competidores.
La queja, interpuesta en un juzgado americano, acusa a Qualcomm de “obtener elevados emolumentos por patentes esenciales y estandarizadas”. El comunicado también denuncia que la empresa californiana se negó a ofrecer estas patentes a competidores, pese que esto está obligado en acuerdos de anticompetencia.
Además, la empresa está también acusada de haber llegado a un acuerdo de exclusividad con Apple para intercambio de patentes.
Qualcomm se ha defendido de la acusación en un comunicado en el que tacha a la queja de ser defectuosa, de faltar a preceptos económicos y de tener varios errores y falta de conocimiento sobre la industria de la tecnología móvil.