¿Te importa tener una vivienda sostenible? En la actualidad es posible conseguirlo a través de la domótica. Por tanto, si estás pensando en mudarte a una vivienda sostenible, podrás instalar la domótica de forma sencilla para lograr la eficiencia energética. Ahora bien, antes de nada, es imprescindible que actives el suministro eléctrico si no estás dado de alta antes de mudarte.
Dar de alta la luz por primera vez en tu nuevo hogar es un trámite imprescindible que se ha de hacer nada más llegar a tu nuevo hogar. Y es que si no se efectúa dicha gestión, no tendrás acceso a la red eléctrica en tu vivienda y por tanto no contarás con la electricidad necesaria para el funcionamiento de la domótica. Por supuesto, debes dar de alta la luz mucho antes de que te mudes de forma definitiva ya que es una gestión que no es inmediata. Efectivamente, tendrás que esperar al menos 7 días hábiles hasta que se dé por tramitada la solicitud. En todo caso, si realmente quieres ser sostenible, es imprescindible que a la hora de solicitar el alta de la electricidad escojas una tarifa de luz ecológica. Sobre ellas vamos a hablar a continuación.
La sociedad está más concienciada con esta emergencia climática y demanda soluciones para cuidar del medio ambiente, como las tarifas energéticas verdes. Efectivamente, es posible reducir las emisiones al contratar una tarifa ecológica, cuya energía es 100% renovable, como las tarifas “eco” de Gas Natural Fenosa, Audax Energía, Holaluz, Podo y muchas otras. ¿Significa esto que la electricidad que llega a mi casa ha sido producida únicamente por fuentes de energía renovable? No exactamente.
Al contratar una tarifa ecológica de electricidad, la comercializadora se compromete a remunerar solo a productores de fuentes de energía renovable
Al contratar una tarifa ecológica de electricidad, la comercializadora se compromete a remunerar solo a productores de fuentes de energía renovable, como la energía solar, por el equivalente del consumo de los clientes que han contratado esta tarifa. Pero como solo existe una red eléctrica general, no es posible separar la electricidad generada por un parque de placas solares de la de una central nuclear.
En todo caso, si bien no te aseguras que tu vivienda sostenible reciba energía 100% verde, al menos tienes garantizado que la cantidad de energía consumida se ha producido. Y por supuesto, cuantas más personas disfruten de esta modalidad tarifaria, mayor será la energía sostenible que se demande a los productores de energía renovable.
La noticia ha causado un gran impacto en todo el mundo. El calor que se ha prolongado en Siberia desde enero hasta junio de 2020 habría sido casi matemáticamente imposible sin la contribución de la humanidad al cambio climático, según un estudio de atribución realizado por científicos del World Weather Attribution (WWA). Y esto no hace más que corroborar el anuncio realizado por el comité de expertos del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático: si no se reducen las actuales emisiones de gases de efecto invernadero la temperatura global de la Tierra aumentará más de 3,4ºC en 2030, incrementando las sequías, inundaciones y migraciones masivas de millones de personas. Todo esto se ha traducido en un mayor interés por la domótica y, por extensión, de la vivienda sostenible y las tarifas verdes. ¿Pero es esto lo único que se puede hacer en pos de la lucha contra el cambio climático? ¡Por supuesto que no!
La movilidad sostenible es en realidad un marco de acciones dirigidas a transformar la forma que tienen los ciudadanos de moverse en las ciudades con el fin de no perjudicar el medio ambiente. Y es que la movilidad es una de las causas más grandes de la contaminación del planeta, de ahí que sea imprescindible tratar que nuestros movimientos sean lo más sostenible posible. A continuación vamos a señalar algunas medidas que pueden conseguir que nuestra movilidad sea realmente sostenible y ecológica:
En realidad todas estas medidas ya existen, por lo que no pertenecen al futuro, sino al presente. Solo hace falta una mentalidad visionaria para poder ponerlas ya en práctica. A la cuenta atrás sentenciada por el IPCC ya le queda menos de una década. ¿Crees que conseguiremos cambiar nuestro fatal destino? ¡Nos interesa tu opinión! Deja un comentario y dinos lo que piensas. Cada punto de vista es muy importante.