En 2021, Telefónica fue la responsable de prestar el servicio universal de telecomunicaciones, sin embargo, según la actual regulación, todos los operadores de comunicaciones electrónicas con ingresos superior a 100 millones de euros deben contribuir a financiar este servicio, en base a su tamaño.
De este modo, el grueso del coste estará financiado por Telefónica, MasOrange y Vodafone, que en conjunto asumirán el 95% del coste, pero no son los únicos que colaboran con este servicio universal cuya función es garantizar que todos los ciudadanos puedan acceder a ciertos servicios básicos de telecomunicaciones a un precio asequible.
En 2021, hasta 20 operadores cumplían el requisito necesario para formar parte del servicio y tendrán que asumir su financiación en base al volumen total de negocio en el mercado, aunque la mayoría son filiales de tres de las grandes compañías.
De este modo, Telefónica con dos compañías asumirá 3,6 millones (un 41,67% del total), seguido de MasOrange con 10 filiales que financiará 3,11 millones (un 36,1%) y con Vodafone cerrando el podio con 3 empresas que aportarán al Fondo un total de 1,51 millones (un 17,55%).
La lista la completan Digi con 126.563 euros que representa un 1,46%; Cellnex con 102.668 euros y un 1,19%; Lyntia con 69.970 euros con un 0,81%; Reintel con 57.385 euros con un 0,66%; y cierra la lista Evolutio con 49.570 que supone un 0,57%.