Durante el acto, celebrado en La Nave (Madrid), el monarca ha destacado el papel creciente de esta tecnología en sectores clave y ha instado a su desarrollo responsable, en un momento en que la IA se consolida como eje estructural de la innovación en España y en Europa.
“La inteligencia artificial ha dejado de ser una promesa para convertirse en un motor clave de innovación, escalabilidad y ventaja competitiva”, destaca el Rey ante un auditorio compuesto por emprendedores, inversores y representantes institucionales. En su intervención, ha subrayado que son pocos los procesos que no se verán afectados por esta tecnología, mencionando expresamente su impacto en áreas como la salud, la ciberseguridad o el procesamiento de lenguaje natural.
Felipe VI ha llamado a “poner esta tecnología al servicio del bien común”, recalcando que su desarrollo debe estar “centrado en las personas”. Según ha expresado, el avance de la inteligencia artificial no puede desligarse de consideraciones fundamentales como el empleo, la privacidad o la equidad algorítmica. Para Su Majestad, estos desafíos requieren un enfoque integral que combine regulación, formación de talento y una responsabilidad compartida entre empresas, gobiernos y ciudadanía.
En este contexto, ha defendido una colaboración público-privada sólida para hacer de España un país donde emprender, especialmente en el ámbito tecnológico, sea “más fácil, más ágil y eficiente”. También ha elogiado el crecimiento del ecosistema de startups en el país, destacando que España ya es el séptimo país europeo en inversión de capital riesgo y el cuarto en número de operaciones. “Estamos construyendo un ecosistema vibrante que genera innovación con impacto directo en la economía y la sociedad”, asegura.
“Construyamos juntos una España que lidere en innovación, pero también en ética"
El discurso del Rey en South Summit 2025 no solo ha sido una defensa del emprendimiento, sino también una propuesta de orientación para el desarrollo tecnológico. “Construyamos juntos una España que lidere en innovación, pero también en ética. Una España más competitiva y justa. Una España que no tema a la inteligencia artificial, porque sabrá guiarla con inteligencia humana”, ha concluido.