La compañía sitúa esta plataforma como un punto de inflexión para las fábricas inteligentes, gracias a una combinación de potencia de cálculo, eficiencia y capacidades de inteligencia artificial que aspiran a transformar el rendimiento en entornos de misión crítica.
La serie Dragonwing IQ-X integra el procesador Qualcomm Oryon, desarrollado sobre un proceso de 4nm y disponible en configuraciones de 8 a 12 núcleos. Esta arquitectura permite alcanzar hasta 45 TOPS de potencia en IA y un rendimiento que, según la compañía, mejora de forma notable la ejecución simultánea de tareas en aplicaciones industriales exigentes.
El diseño incluye soporte para temperaturas extremas desde –40 °C hasta 105 °C, lo que amplía su utilidad en fábricas, maquinaria pesada o instalaciones expuestas. Asimismo, ofrece compatibilidad nativa con múltiples interfaces de comunicación y periféricos habituales en PLCs, panel PCs y controladores de borde. Qualcomm destaca que esta integración reduce la necesidad de módulos adicionales y simplifica el diseño de equipos rugerizados.
La serie Dragonwing IQ-X responde, según la compañía, a la necesidad de contar con dispositivos capaces de integrar cálculo intensivo, alta conectividad y eficiencia energética en un espacio reducido. Nakul Duggal, responsable del área Industrial, Embedded IoT y Automoción de Qualcomm, explica que esta familia “permite construir controladores y PCs industriales más rápidos, inteligentes y duraderos, reduciendo complejidad y tiempos de desarrollo”.
El motor NPU integrado permite ejecutar modelos de IA directamente en el dispositivo, sin depender de la nube
La compañía pone el foco en la inteligencia artificial como el elemento diferenciador de la nueva serie. El motor NPU integrado permite ejecutar modelos de IA directamente en el dispositivo, sin depender de la nube, lo que aporta ventajas de latencia, privacidad y disponibilidad para procesos clave.
Entre los casos de uso más avanzados destacan el mantenimiento predictivo, la detección de fallos en tiempo real, la inspección automatizada de calidad y la monitorización basada en condiciones. Qualcomm habilita estas capacidades mediante su AI Software Stack, compatible con ONNX, PyTorch y otras herramientas estándar, lo que facilita la portabilidad de modelos ya desplegados en otros entornos.
De este modo, la empresa ofrece una base para desarrollar sistemas industriales que integran visión artificial, analítica avanzada y control autónomo en un único módulo de bajo consumo.
Uno de los puntos clave del lanzamiento es la estrategia de Qualcomm para reducir los plazos de desarrollo de fabricantes industriales. La serie Dragonwing IQ-X se integra en formatos COM estándares, lo que favorece reemplazos directos en placas existentes. Además, la compañía proporcionará kits de evaluación para acelerar la validación de hardware y software.
La plataforma es compatible con Windows 11 IoT Enterprise LTSC y middleware industrial como Qt, CODESYS o EtherCAT, habitual en robots, maquinaria y sistemas de automatización. Esta interoperabilidad facilita el despliegue de aplicaciones industriales avanzadas sin necesidad de rediseñar todo el ecosistema.
Fabricantes como Advantech, Congatec, NEXCOM, Portwell, SECO y Tria ya han confirmado que trabajan en equipos comerciales basados en estos procesadores.
Sus productos llegarán al mercado en los próximos meses y marcarán la primera oleada de PCs industriales equipados con la arquitectura Oryon fuera del sector de consumo.