Qualcomm ha anunciado el lanzamiento del Qualcomm Dragonwing Q-6690, el primer procesador móvil empresarial del mundo que integra capacidades UHF RFID de forma nativa.
Esta innovación supone un avance estratégico en el desarrollo de dispositivos inteligentes para sectores como retail, logística, manufactura y entornos industriales, al combinar RFID, inteligencia artificial (IA) y conectividad avanzada en una sola plataforma.
El nuevo chip elimina la necesidad de módulos externos para la lectura RFID, permitiendo diseños más compactos y eficientes, y habilitando casos de uso centrados en la seguridad, la trazabilidad y la interacción sin contacto.
El Dragonwing Q-6690 incorpora conectividad 5G, WiFi 7, Bluetooth 6.0 y ultra-wideband (UWB), lo que garantiza experiencias basadas en proximidad y conectividad global optimizada. Esta combinación está orientada a dispositivos como terminales rugerizados, puntos de venta (POS) y quioscos inteligentes, ofreciendo un ecosistema preparado para múltiples formatos y escenarios de uso.
La integración de RFID con IA y redes de última generación busca “acelerar la innovación en sectores como el retail, la logística y la fabricación”, explica Art Miller, vicepresidente y responsable de retail en Qualcomm. La compañía subraya que esta plataforma responde a las crecientes necesidades de los comercios por soluciones adaptables, capaces de gestionar inventarios en tiempo real, habilitar experiencias sin fricción y optimizar operaciones.
Configuración modular y actualizaciones OTA
Una de las novedades más relevantes del Dragonwing Q-6690 es la introducción de feature packs configurables por software, que permiten a los fabricantes personalizar funciones como potencia de cómputo, capacidades multimedia, soporte de cámaras o integración de periféricos. Además, estas configuraciones pueden actualizarse mediante OTA (Over-The-Air), lo que prolonga el ciclo de vida de los dispositivos y reduce la necesidad de rediseños de hardware.
Este enfoque modular acorta el tiempo de llegada al mercado y disminuye los costes de certificación y mejora la escalabilidad de las soluciones. La capacidad de incorporar RFID en la arquitectura del procesador supone eliminar hardware adicional, lo que reduce costes, mejora la eficiencia energética y permite diseños más ligeros. Esta convergencia tecnológica habilita experiencias sin contacto, optimiza la gestión de inventarios y refuerza la autenticación de productos, aspectos clave para sectores que exigen precisión y seguridad.
Disponibilidad
Diversos fabricantes líderes ya han confirmado la adopción del Dragonwing Q-6690 en sus próximos dispositivos, entre ellos Zebra, Honeywell, Urovo, HMD Secure y CipherLab. Las primeras soluciones comerciales basadas en este procesador llegarán en los próximos meses.