Unas se ganan y otras se pierden. La pelea por las patentes entre Apple y Samsung ha tenido un resultado desfavorable para la compañía surcoreana que deberá indemnizar a la empresa estadounidense y no recibirá compensación alguna por las copias que esta también realizó de los equipos de la saga Galaxy.
Samsung tendrá que pagar 800 millones de euros en concepto de daños a la compañía estadounidense por haber violado sus patentes en tres de las innovaciones aplicadas a sus productos más sonados, iPhone, iPad y iPod Touch
La empresa surcoreana ha advertido que recurrirá “de inmediato” el fallo para que el tribunal rectifique su aplicación, y que de lo contrario se irán hasta el tribunal de apelaciones. El juzgado actual, a diferencia del asiático que dio su veredicto el viernes, no ha estimado ninguna compensación por las patentes denunciadas por Samsung y que Apple también habría copiado, y debido a esto no ha saltada la información como un suceso noticioso, aunque sí, efectivamente, la empresa de la manzana mordida también copió patentes de su rival y competidor más cercano en el campo de móviles y tabletas.
La decisión ha permitido que las acciones de Apple crecieran 12 dólares y se colocaran en 675 dólares por participación. Samsung ha advertido que esta práctica es sencillamente una pérdida para el consumir estadounidense.