La filial de Deutsche Telekom despedirá al 27% de su actual plantilla con el fin de mejorar los resultados financieros.
T-Systems reestructurará su negocio con una reducción de costes que se traduce en el despido de 10.000 empleos hasta 2020, el equivalente al 27% de la plantilla actual, que asciende a 37.000 trabajadores.
El objetivo de la compañía es reducir costes y mejorar los resultados financieros, ha explicado la firma. Además, acumula unas pérdidas operativas de más de 3.200 millones de euros desde 2012 y prevé ahorrar 600 millones de euros anuales de cara a 2021. El grueso será en Alemania, donde se suprimirán hasta 6.000 puestos de trabajo, un tercio de la fuerza laboral en el país.
Adel Al-Saleh, consejero delegado de T-Systems desde principios de año, ha explicado que alrededor de los 2.000 empleos eliminados en Alemania se corresponden con gestión y tareas administrativas. La mayoría de estas funciones se deslocalizarán a otros territorios de costes más bajos, como India y Turquía.
“T-Systems será una empresa más sólida económicamente, con más de 30.000 empleados en 2021”, destaca Al-Saleh. La filial de Deutsche Telekom destinará parte de los ahorros para crecer en áreas de más potencial como ciberseguridad, servicios en la nube e Internet de las Cosas.