Según el estudio encargado por la compañía y realizado por el economista Andrey Fradkin (Boston University) y la analista Jessica Burley (Analysis Group), el 90% de ese volumen no generó comisiones para Apple, al no tratarse de ventas directas dentro de la tienda. Con ello busca lavar la imagen de las duras críticas recibidas durante la batalla legal con Epic Games.
Los bienes y servicios digitales generaron 131.000 millones de dólares
El informe desglosa las cifras en tres grandes categorías de la App Store. Por un lado, los bienes y servicios digitales, que generaron 131.000 millones de dólares, con especial protagonismo de las aplicaciones de juegos móviles, edición de vídeo y fotografía, y herramientas corporativas. Esta categoría incluye tanto suscripciones como compras integradas.
En segundo lugar, el comercio de bienes físicos a través de apps superó el billón de dólares, liderado por servicios de entrega de comida, compras de supermercado y pedidos con recogida. Esta categoría ha sido la de mayor crecimiento desde 2019, según el estudio.
La tercera línea de ingresos corresponde a la publicidad dentro de aplicaciones móviles, que también ha mostrado un incremento relevante, aunque sin cifras desglosadas en el comunicado.
Comparando con 2019, el gasto total facilitado por la App Store se ha más que duplicado. En el caso específico de Estados Unidos, el gasto digital a través de la plataforma se multiplicó por siete en los últimos cinco años, debido en gran parte a la expansión de los pagos móviles. En China, las compras de alimentación online crecieron más de cinco veces en el mismo periodo.
En términos geográficos, Estados Unidos, China y Europa destacan como los mercados con mayor incremento en volumen de facturación y ventas. Apple subraya que el efecto económico de la App Store se extiende globalmente a más de 175 países.
El informe recalca el papel de la App Store como motor de ingresos para los desarrolladores. Las ventas de bienes y servicios digitales (131.000 millones) representan cerca del 10% del total, lo que refleja una diversificación creciente hacia actividades como el comercio electrónico y la movilidad urbana, más allá del software.