Zoom avanza y presenta AI Companion 3.0, una evolución de su asistente que inaugura una etapa en la que la IA agéntica no se limita a responder peticiones, sino que interpreta contexto, prioridades y objetivos de los usuarios para anticiparse a sus necesidades.
AI Companion 3.0 se presenta como un elemento central de Zoom Workplace y Zoom Business Services. La compañía insiste en que ya no se trata de un apoyo pasivo que toma notas o genera resúmenes, sino de un “compañero inteligente y proactivo” capaz de sugerir acciones, coordinar tareas y transformar información dispersa en conocimiento útil para la toma de decisiones.
En palabras de su fundador y CEO, Eric Yuan, la visión de la compañía es que la IA “se convierta en una capa fluida e integrada en toda la plataforma, ayudando a que las personas y los equipos logren más, con menos esfuerzo y más impacto”.
Por su parte, Louise Newbury-Smith, directora de Zoom en Reino Unido e Irlanda, lo ha resumido de forma práctica: las novedades afectan tanto a la preparación como al desarrollo y al seguimiento de reuniones, con el objetivo de “desatar un nuevo nivel de productividad”.
La nueva versión amplía su radio de acción más allá de las reuniones virtuales. El asistente ahora puede registrar y organizar información de encuentros presenciales y de plataformas externas como Microsoft Teams o Google Meet, algo que refuerza la interoperabilidad. También genera agendas dinámicas, propone recordatorios en tiempo real y produce resúmenes ejecutivos orientados a la acción.
Una de las funciones más destacadas es “liberar mi tiempo”, que analiza el calendario del usuario y sugiere qué reuniones pueden omitirse, ofreciendo al mismo tiempo notas generadas automáticamente para no perder información relevante. De este modo, se plantea como una herramienta para combatir la saturación de agendas en entornos corporativos.
La plataforma introduce un espacio de trabajo unificado que centraliza conversaciones, proyectos y documentos
Además, la plataforma introduce un espacio de trabajo unificado en navegador y aplicación de escritorio, que centraliza conversaciones, proyectos y documentos. Este panel se adapta dinámicamente a cada flujo de trabajo, lo que permite a los usuarios gestionar la información sin necesidad de alternar entre múltiples herramientas.
En paralelo, AI Companion 3.0 incorpora un motor de redacción e investigación avanzada que cruza datos internos de la empresa con información pública. El resultado es la creación de documentos y contenidos de alto nivel con IA generativa en menos tiempo, una capacidad con impacto directo en la productividad de equipos de marketing, ventas y comunicación.
Zoom también amplía las capacidades de su IA al terreno de la relación con clientes. Bajo el paraguas de Zoom Business Services, la compañía ha lanzado Agentic AI Expert Assist, un asistente que automatiza tareas repetitivas de soporte y proporciona información en tiempo real a los agentes.
La solución CX Insights convierte interacciones en inteligencia estratégica, ayudando a las organizaciones a identificar tendencias y mejorar la toma de decisiones. Por su parte, Automated Quality Management permite evaluar la calidad de las conversaciones con clientes, incluidas las gestionadas por agentes virtuales.
El Zoom Virtual Agent añade la opción “Bring Your Own Voice”, que permite a las empresas personalizar el tono y estilo de las interacciones, reforzando así la identidad de marca. Y en el ámbito comercial, Zoom Revenue Accelerator introduce automatizaciones para la prospección y el contacto multicanal, con capacidad para identificar clientes potenciales a partir de eventos.
Zoom ha anunciado también Custom AI Companion, una solución low-code que permitirá a las organizaciones diseñar sus propios agentes de IA, adaptados a flujos de trabajo específicos e integrados con aplicaciones de terceros. Esta funcionalidad, prevista para noviembre de 2025, será el único complemento con coste adicional.
En paralelo, la plataforma suma mejoras en la experiencia de usuario: traducción de voz en tiempo real, generación automática de clips a partir de presentaciones y avatares fotorrealistas para reuniones, pensados como alternativa cuando no se desea activar la cámara.
Con estos anuncios, Zoom refuerza su estrategia AI-first. El objetivo es transformar su plataforma en un espacio integral de colaboración donde la inteligencia artificial no sea un añadido, sino el núcleo que articula el trabajo digital.
El reto, de aquí en adelante, será convertir estas promesas en métricas tangibles de productividad, sin comprometer la seguridad ni la experiencia del usuario. Para Zoom, la apuesta está clara: la colaboración empresarial del futuro se construirá sobre inteligencia artificial capaz de anticiparse, contextualizar y actuar, más que limitarse a asistir.