La teleco que lidera Marc Murtra ha presentado sus resultados económicos relativos al primer trimestre del 2025 de los que se extrae unos ingresos totales que se han situado en 9.221 millones de euros, con un incremento orgánico del 1,3%, impulsado principalmente por el negocio empresarial (+5,4%) y el segmento residencial (+1,8%). Sin embargo, en términos reportados, los ingresos han descendido un 2,9% debido a los efectos negativos del tipo de cambio.
El EBITDA ajustado ha alcanzado los 3.014 millones de euros, un 0,6% más en términos orgánicos, aunque con una caída del 4,2% en cifras reportadas. Telefónica mantiene sus previsiones para el conjunto del año, que incluyen un crecimiento orgánico interanual en ingresos, EBITDA y caja operativa ajustada a las inversiones (EBITDAaL - CapEx), además de un ratio de inversión sobre ventas por debajo del 12,5%.
“Los resultados del primer trimestre cumplen con nuestras expectativas, mientras que el flujo de caja libre refleja la estacionalidad habitual. Los resultados del Grupo mejorarán a lo largo del año, en línea con nuestras previsiones para 2025”, destaca Emilio Gayo, CEO del grupo Telefónica.
Durante el primer trimestre del año, Telefónica ha invertido 938 millones de euros, lo que representa un descenso del 2,8% en términos orgánicos y del 6,7% en cifras reportadas respecto al mismo periodo del año anterior. Con ello, la ratio de inversión sobre ingresos se ha reducido al 10,1%, en línea con el objetivo de eficiencia marcado por la compañía.
La caja operativa se ha elevado a 1.412 millones de euros, un ligero avance del 0,6% en orgánico, mientras que la generación de caja libre (FCF) de las operaciones continuadas ha cerrado con una cifra negativa de 205 millones de euros, comportamiento habitual en este periodo del año.
En cuanto a la deuda, Telefónica ha logrado reducirla en 112 millones de euros desde diciembre de 2024, situándola en los 27.049 millones de euros
En cuanto a la deuda, Telefónica ha logrado reducirla en 112 millones de euros desde diciembre de 2024, situándola en los 27.049 millones de euros al cierre del trimestre. La ratio de apalancamiento se mantiene en 2,67 veces EBITDAaL. En esta línea, la teleco ha emitido financiación a largo plazo por valor de 6.780 millones de euros, lo que le permite mantener una posición de liquidez superior a los 20.400 millones y una vida media de la deuda de 11,5 años, con cobertura para más de tres años.
En paralelo, la compañía ha anunciado el pago de un dividendo en efectivo de 0,30 euros por acción para 2025, dividido en dos tramos: 0,15 euros en diciembre y 0,15 euros en junio de 2026. Además, el segundo tramo del dividendo correspondiente a 2024 se distribuirá el 19 de junio.
Telefónica ha cerrado el trimestre con una base de 354 millones de accesos. Destacan los aumentos del 9% en clientes de fibra óptica hasta el hogar (FTTH) y del 1% en líneas móviles de contrato. El índice NPS (Net Promoter Score), que mide la satisfacción del cliente, ha alcanzado una cifra récord de 35 puntos.
La compañía ha sumado 1,5 millones de nuevas unidades inmobiliarias pasadas con FTTH
En despliegue de infraestructura, la compañía ha sumado 1,5 millones de nuevas unidades inmobiliarias pasadas con FTTH, alcanzando un total de 80 millones. El 37% de estas nuevas conexiones se ha realizado mediante vehículos de inversión en fibra.
Por otro lado, su cobertura móvil 5G ha registrado avances significativos en los principales mercados, alcanzando al 92% de la población en España, al 98% en Alemania, al 62% en Brasil y al 77% en Reino Unido. A nivel global, la cobertura media se sitúa en el 75% de los mercados principales.
En cuanto a la estrategia de simplificación del perímetro de operación, Telefónica ha completado la venta de su negocio en Argentina y ha alcanzado un acuerdo para desprenderse de su participación en Telefónica Colombia, pendiente aún de aprobaciones regulatorias. En abril se comunicó también la salida del mercado peruano.
Estas decisiones responden al plan de reducción de exposición en Hispanoamérica (Hispam), una región que en este trimestre ha sido clasificada como operación discontinuada, lo que ha llevado a una pérdida consolidada de 1.731 millones de euros al incorporar los efectos contables de estas desinversiones.
Con estos movimientos, Telefónica refuerza su foco en mercados clave como España, Brasil, Alemania y Reino Unido, donde el crecimiento orgánico y la eficiencia operativa continúan siendo los pilares de su estrategia tecnológica y financiera.