Al mismo tiempo, la firma avanza en una profunda reestructuración interna que incrementa la autonomía de su filial española y que, según la documentación registrada recientemente en la Bolsa de Dublín, podría anticipar movimientos estratégicos de mayor calado, incluida una posible salida a bolsa.
Durante los tres primeros trimestres del año, Digi España ha ingresado más de 681 millones de euros, lo que supone un aumento del 19% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Asimismo, el operador ha alcanzado un Ebitda de 144 millones, un 8% más interanual. Este crecimiento se apoya en un incremento sustancial de la inversión, que asciende a 395 millones de euros en nueve meses, un 53% más que en 2024.
Estas inversiones se han orientado principalmente al despliegue de fibra óptica de última generación y al lanzamiento de la red móvil propia, cuyo servicio comenzó oficialmente el pasado 1 de julio. De este modo, la compañía avanza en su objetivo de reducir progresivamente la dependencia mayorista y reforzar su competitividad en un mercado especialmente tensionado por la competencia en precios.
El crecimiento comercial vuelve a ser uno de los puntos fuertes de DIGI. Entre enero y septiembre, el operador registró más de 1,18 millones de portabilidades netas, manteniéndose como líder destacado del sector por décimo trimestre consecutivo. En total, la compañía cuenta ya con más de 10,2 millones de clientes, un 29% más que hace un año.
El desglose muestra una evolución igualmente significativa con 6,93 millones de líneas móviles (+1,38 millones en un año); 2,43 millones de clientes de fibra (+622.000); 768.000 líneas fijas (+186.000); y 133.000 clientes de televisión, un servicio incorporado en diciembre de 2024.
Además, DIGI ha reforzado su oferta con más de 120 canales en Digi TV y mejoras en sus principales tarifas. En fibra, la modalidad de 300 Mb pasa a ofrecer 500 Mb sin subir el precio, mientras que la opción de 600 Mb se incrementa hasta 750 Mb. En móvil, la tarifa IlimiTODO reduce su precio en líneas adicionales y mejora prestaciones, alineándose con la estrategia de ofrecer propuestas de alto valor a precios competitivos.
El operador mantiene también su apuesta por la creación de empleo y la cercanía con el cliente. A finales de septiembre, Digi superó los 10.000 trabajadores directos en España, consolidándose como el segundo operador con mayor plantilla del país. Durante este ejercicio, la compañía ha abierto dos nuevos centros de atención al cliente en Valencia y Sevilla, generando cerca de 300 empleos directos adicionales.
Asimismo, Digi ha continuado fortaleciendo su presencia física con más de 65 tiendas propias, que funcionan como punto de asesoramiento y soporte directo al usuario, una estrategia poco habitual entre los operadores de bajo coste y que contribuye a reforzar su posicionamiento.
Más allá de los resultados operativos, Digi Communications ha iniciado un movimiento de calado que apunta a darle mayor autonomía financiera a su filial española. La compañía ha registrado un folleto en la Bolsa de Dublín donde detalla una reorganización que separa la deuda de Digi Spain del resto del grupo. Esto implica que la filial no responderá por obligaciones financieras de otras divisiones internacionales, lo que la independiza operativamente y mejora su perfil de riesgo.
Este cambio permite que Digi Spain pueda contraer su propia deuda, siempre por debajo de 3,5 veces su Ebitda, una característica fundamental para cualquier empresa que contemple acudir a los mercados de capitales. Además, facilita la evaluación individualizada del negocio español, que es una de las unidades con mayor crecimiento del grupo y, por tanto, una de las más atractivas para potenciales inversores.
La documentación no confirma explícitamente una salida a bolsa, pero sí señala que el grupo evalúa distintas “oportunidades estratégicas” para potenciar su posición financiera en todas las geografías donde opera. En España, donde Digi es ya el cuarto operador por volumen de clientes móviles y uno de los que más cuota gana trimestre tras trimestre, una eventual entrada en el mercado bursátil podría facilitar el acceso a capital para acelerar su despliegue de red y su expansión comercial.