¿Merece la pena volver a jugar el título de Naughty Dog? ¿Y jugarlo por primera vez? ¿Gana con respecto a la primera versión? ¿Se ha quedado viejo como les pasa a algunas películas?
El debate en los medios y redes especializadas en videojuegos cuando se anunció el "remake" de "The Last of Us. Part I" se centraba en si era necesario o totalmente superfluo. Y parecía que la postura que ganaba era la contraria a su publicación. ¿Por qué?
Aquí no se trata de matar oleadas y oleadas de zombis (infectados), de disparar y avanzar; en este título cobra muchísima importancia la actitud de los personajes
"The Last of Us" había conquistado todos los premios posibles (240 como mejor juego del año), había sido récord de ventas, tuvo las mejores reseñas... Y se puede decir que había creado una nueva manera de afrontar un videojuego. Aquí no se trata de matar oleadas y oleadas de zombis (infectados), de disparar y avanzar; en este título cobra muchísima importancia la actitud de los personajes, la transformación personal de los personajes, el sufrimiento... la forja del carácter.
Eso se pudo lograr ya en la versión original gracias a la potencia gráfica de la PS3. Los rostros habían dejado de ser poco más que una máscara inexpresiva. Y, sin embargo, si revisitamos ahora aquellos títulos nos resultarán hieráticos comparados con lo que ofrecen las nuevas generaciones de consolas.
Así que, si un título era susceptible de mejorar sensiblemente sacando partido de las capacidades de la PS5, TLoU es uno de ellos.
Naughty Dog, la desarrolladora, abordó la creación de The Last of Us como una película. Y generalmente una buena película necesita un guión. En este caso es más una "road movie" que una película de acción, aunque, claro, tiene que mantener acción y, sobre todo, sigilo.
El desafío para este remake era mantener el original, pero adaptarlo desde cero a una nueva plataforma mucho más potente. El riesgo era que se les fuera de las manos y convirtieran un videojuego casi intimista en un matazombies. Pero no han caído en ello. Han reconstruido todo The Last of Us para la PS5, pero tras los primeros minutos de adaptación te sientes como en el original.
¿Entonces? ¿Para qué hacerlo? Juegas al original y ya está. Error. Sigues estando en una película lenta, no frenética (se puede jugar en resolución 4K a 30 imágenes por segundo o a 60 en 4K dinámicos. Recomendable la primera opción), pero la riqueza en los detalles es abrumadora. La iluminación y la feracidad gráfica le dan un realismo y profundidad impensables en 2013, cuando se lanzó.
La historia es la misma: un virus se desata en Estados Unidos y comienza a infectar a la población convirtiéndola en caníbal. En ese marco, el protagonista, Joel, trata de escapar con su hermano y su hija Sarah, pero en un control, un soldado la mata. Es el arranque y lo que conformará la amargura de Joel y explicará su comportamiento.
En la entradilla me planteaba unas preguntas y ha llegado el momento de contestarlas.