La 5G podría ser una inversión, no un gasto

La compañía europea Ericsson (redes) y la estadounidense Qualcomm (procesadores) han encargado un estudio para evaluar el impacto que tendrá en la economía europea el despliegue de la quinta generación de telefonía móvil, la 5G.

La empresa encargada de realizarlo es Analysys Mason, quien ha estudiado la incidencia dividiendo la actividad en diversos sectores, desde la agricultura inteligente, hasta la Administración.

En cifras absolutas, Alemania sería el país más beneficiado con un beneficio neto de 38.513 millones de euros. España no es de los mejor parados. Es cierto que el estudio le adjudica un beneficio de 9.288 millones, pero apenas serían 12 euros por persona y año, frente a los 29 de Noruega y Alemania, los 55 de Austria, los 58 de Finlandia o los 64 de Suiza.

Por sectores tampoco destacamos en ninguno especialmente. España ocupa en casi todos los supuestos un puesto en la zona media-baja según el ratio coste-beneficio. Por ejemplo, en cuanto a sector público (Smart Public Services), que englobaría Turismo, Educación, Inmuebles municipales y Salud y Hospitales, mientras Suecia ocupa el primer lugar con un ratio de 54, España está en el puesto 17 de 30, con un ratio de 4,5. En puestos similares, con ratios muy parecidos está en Smart Urban, Smart Rural y todavía un poco más abajo en Smart Production. 

El estudio, encargado por dos de las empresas más implicadas en el despliegue de la 5G, es positivo en todos los aspectos, aunque su impacto económico es muy diferente por países. Mientras que con una inversión de 3.686 millones en España el beneficio neto sería de 9.288 millones, en Alemania, invirtiendo menos del doble (5.953) lograría un beneficio neto cuatro veces superior (38.512). 

Tal vez cuando vean que hay beneficios económicos, los conspiranoicos que achacan el coronavirus a las redes 5G comienzan a entrar en razón...