Williams FW14B, el coche que revolucionó la Fórmula 1

A la hora de hablar del Williams FW14B también hay que mencionar a su predecesor, el FW14. Este monoplaza sirvió de inspiración al FW14B. Contaba con una caja semiautomática, un control de tracción y una primera versión de la suspensión activa. Hoy en día, los coches de carretera incorporan estas tecnologías gracias, en gran parte, a la labor de los ingenieros de Williams y de AP Racing.

Con un total de 8 victorias a lo largo de la temporada de 1991

Aunque el FW14 también se puede considerar un coche exitoso, puesto que logró 8 victorias a lo largo de la temporada de 1991, éste sufrió de múltiples problemas de fiabilidad. Debido a esto, tanto Nigel Mansell como Riccardo Patrese no fueron capaces de hacerse con el mundial de pilotos de aquel año.

Así pues, una vez llegado el invierno en el equipo Williams se pusieron manos a la obra con el fin de solventar dichos problemas de fiabilidad. Además, para este año de 1992 Williams se hizo con los servicios del por aquel entonces un jóven ingeniero Adrian Newey (actual ingeniero del equipo Red Bull). En su llegada al equipo de Groove, Newey lejos de involucrarse en cualquier diseño mecánico, se centró en mejorar la aerodinámica del FW14, implementando un nuevo aspecto al FW14B que recordaba a diseños suyo ya vistos en Leyton House Racing.

Cabe destacar que el mérito del diseño del FW14B aunque hoy en día muchos se lo otorgan a Adrian Newey, fue Patrick Head el encargado de la parte mecánica del monoplaza mientras que Paddy Lowe fue el encargado de desarrollar y perfeccionar la famosa suspensión activa.

Características técnicas del FW14B

El éxito del Williams FW14B se debió a la gran máquina de ganar carreras que era. Gran parte de que esto fuera así fue gracias al gran motor que montaba el coche. En aquel año de 1992 Renault era el encargado de suministrar los motores al equipo británico. Es por esto, que el FW14B montó un motor V10 de la marca francesa. Este motor, según palabras del propio Patrick Head, si bien no era el motor que más potencia tenía (por aquel entonces era el motor Honda) mostraba una ventaja respecto a los demás y este era su menor peso que el de sus competidores.

Aún disponiendo de una ligera menor potencia que el motor de la marca nipona, Honda, el hecho de que pesara 140 Kg menos le otorgaba una gran ventaja al Williams. Además, este motor Renault era capaz de llegar a unas revoluciones por minuto (rpm) cercanas a las 14.400 y era alimentado por hasta 230 L de combustible ELF.

El FW14B no solo contaba con un gran motor, sino que también disponía de la famosa suspensión activa. Este sistema no fue exclusivo de Williams, puesto que Lotus de la mano de Colin Chapman ya intentó desarrollar su propia suspensión activa que supliera las faldillas presentes en los monoplazas de inicios de los 80. No obstante, dada la tecnología de aquel entonces el equipo Lotus no podía recoger los datos correctamente y tuvo que abandonar el diseño de suspensión activa.

Con el tiempo, Williams trató de recuperar esta idea con un diseño propio, más pequeño y compacto comparado con el propuesto por Lotus. En el comienzo este sistema era principalmente mecánico, llegando a conquistar victorias como las logradas por Nelson Piquet en la temporada de 1987. Sin embargo, de cara a 1988 tras la marcha del propio Nelson Piquet y con el adiós a los motores Honda, Williams pasó por una temporada donde los resultados no acompañaron y decidieron abandonar la idea de una suspensión activa.

El dominante McLaren MP4/4 de Ayrton Senna y Alain Prost

Leer más

Ya en la década de los 90, dada la revolución informática Williams decidió volver a probar su diseño de suspensión activa. En este caso, se empezó a implementar componentes electrónicos, por lo que este se puede considerar como uno de los primeros casos de electrificación de la Fórmula 1.

Así pues, este sistema de suspensión supuso una gran revolución. El funcionamiento de este diseño es el siguiente. La suspensión del Williams FW14B contaba con una centralita electrónica (llamada coloquialmente cerebro electrónico) encargado de gestionar todo el movimiento envuelto en los actuadores hidráulicos. Su funcionamiento era tal, que bajo escenarios donde el coche frenaba, la suspensión evitaba que el coche se inclinara hacia adelante mientras que, de forma recíproca, cuando el coche aceleraba la suspensión evitaba que el coche elevara su “trompa”. Este gran funcionamiento no solo se limitaba a escenarios de frenada o aceleración, sino que también jugaba un papel muy importante en curva. Cuando el coche se encontraba en medio de un giro, la suspensión aplicaba una mayor presión a los amortiguadores externos. Esto permitía una altura casi constante del FW14B, lo que no solo ayudaba al buen comportamiento en entrada y salida de una curva sino también a un buen comportamiento aerodinámico al favorecer el fondo plano del monoplaza.

Sin embargo, este sistema no se adaptaba de igual manera a todos los pilotos. El principal ejemplo se podía encontrar en el propio equipo Williams. Mientras que Nigel Mansell surcaba los distintos circuitos gozando de una gran ventaja respecto al resto (incluido su compañero), Riccardo Patrese no confiaba tanto en el sistema y no supo adaptarse a él. Tal era la diferencia entre Nigel y Riccardo que durante el GP de Silverstone de 1992 se pudo ver una gran diferencia entre ambos pilotos, en la famosa curva de Copse, Nigel Mansell llegó a rodar hasta 40 km/h más rápido que su propio compañero de equipo Riccardo Patrese.

Sumado al motor y a la suspensión activa, el FW14B contaba con una caja de cambios semiautomática que, por aquel entonces, se consideraba como una gran revolución. Si bien en el año 1991 fue el gran rompecabezas de los ingenieros de Williams, ya en 1992 estos problemas de fiabilidad parecían solventados. La ventaja respecto a los rivales radicaba principalmente en que la caja de cambios del Williams era capaz de realizar los cambios de marcha entre cuatro y cinco veces más rápido. Además, esta caja de cambios le permitía al Williams contener las sobre revoluciones del motor lo que llegaba a otorgar una ventaja a Williams tanto en frenada como en fiabilidad.

Lotus 78, el coche que revolucionó la aerodinámica en la Fórmula 1

Leer más

Por último, hay que mencionar el control de tracción presente en el FW14B. A día de hoy, este sistema está prohibido en la Fórmula 1, pero en aquel entonces se consideró como una gran revolución y una necesidad clave. En pocas palabras, el control de tracción es un software que como su nombre indica ayuda al piloto a traccionar mejor lo que suponía una gran ayuda en escenarios de lluvia.

Palmarés del FW14B

El monoplaza diseñado por el equipo Williams en su sede de Groove es uno de los monoplazas más dominadores en la historia de la Fórmula 1 y los resultados lo avalan. Tal y como se ha comentado en el comienzo del artículo, durante la temporada de 1992 el FW14B logró 10 victorias de las 16 posibles, 9 de la mano de Nigel Mansell y 1 de la mano de Riccardo Patrese.

La gran superioridad del Williams se pudo apreciar desde un comienzo durante el GP de Sudáfrica donde lograron un cómodo primer y segundo lugar. Durante las siguientes carreras de México, Brasil, España y San Marino Nigel Mansell pudo encadenar estos cinco GPs logrando la victoria con su compañero en segundo lugar a excepción de España donde tuvo que retirarse debido a un accidente.

Una excepción al reinado de Williams llegó en Mónaco donde el laureado Ayrton Senna logró hacerse con la victoria conduciendo su McLaren. Otra de las excepciones fue Canadá, donde tanto Nigel Mansell como Riccardo Patrese sufrieron de problemas siendo el caso de Mansell un accidente y un fallo en la caja de cambios en el caso de Patrese.

Ya en el caso de los GPs de Francia y Gran Bretaña, Williams logró volver a encadenar dos dobletes de forma cómoda que de no ser por un trompo de Riccardo en el GP de Alemania, pudieron haber sido tres.

Para finalizar, en Bélgica pese a disponer de una suspensión activa y un control de tracción que otorgaba una gran ventaja a Williams en escenarios de lluvia, no pudieron hacerse con la victoria en el diluvio de Spa. Fue Michael Schumacher quien se alzó con la victoria en aquella ocasión, logrando el alemán su primera victoria de muchas en la Fórmula 1.

Aquel año de 1992, los pilotos de Williams sumaron un total de 10 victorias, 21 podios, 15 poles, 11 vueltas rápidas y más de 800 vueltas lideradas. Ésto permitió a Nigel Mansell hacerse con el Mundial de pilotos y a Williams con el Mundial de Constructores. Con estos datos, no cabe duda de que el FW14B diseñado y desarrollado por el equipo Williams fue y es una gran máquina de ganar carreras.