El 8 de julio de 2025, Bentley sorprendió en Crewe con el EXP 15, un concept car eléctrico que abanderará su próxima etapa de lujo sin emisiones. Sin embargo, la conversación no ha girado solo en torno a sus puertas tipo coach o su parrilla luminosa, sino a una duda que late en los círculos de diseño: ¿está la marca siguiendo de cerca el camino marcado por Jaguar con su Type 00 con ese diseño monolítico y, de hacerlo, corre el riesgo de diluir su esencia? Hoy analizamos el coche, su contexto histórico y, sobre todo, ese posible «efecto Jaguar» que tanto intriga a la comunidad.
El EXP 15 rescata la épica del «Blue Train» Speed Six de 1930 y la reinterpreta como un gran turismo elevado, una mezcla entre GT, berlina fastback y SUV urbano. Sus proporciones, capó infinito, hombros musculosos y trasera afilada, rinden homenaje a aquella hazaña ferroviaria mientras exhiben un lenguaje formal del siglo XXI, con la parrilla como pieza escultórica iluminada.

El concept debutó en el recién inaugurado estudio de diseño de Crewe, flanqueado por el Speed Six original para subrayar la continuidad entre pasado y futuro. En la puesta en escena, Bentley exhibió baúles gemelos bajo el capó y su quinto emblema Winged B, ahora con rasgos de halcón peregrino y retroiluminación, símbolos de una modernidad que no renuncia a la artesanía.
Diseño exterior, cinco principios y mucho debate
Robin Page, director de Diseño, resume la nueva filosofía en cinco ideas: Elegancia Vertical, Parrilla Icónica, Línea de Capó Infinita, «Bestia en Reposo» y Escudo Prestigioso. El frontal, casi vertical y sin faros circulares, convierte el panel luminoso en firma nocturna. En la zaga, la luz tridimensional de diamante envuelve la tapa del maletero.

Precisamente ese juego de luces y masas ha disparado las comparaciones con el Jaguar Type 00. La comunidad habla de «hacer un Jaguar» y se pregunta si Bentley ha estirado demasiado el chicle arriesgando un ADN consolidado y rentable. La verticalidad del frontal, la calandra retroiluminada y los gráficos LED recuerdan la «strikethrough» del concept felino. La pregunta es si esta convergencia responde a una tendencia estética global o a una falta de valentía propia.

Habitáculo phygital, tradición y ciencia ficción
Pulsar el tirador revela un interior asimétrico de tres plazas. El asiento del acompañante gira cuarenta y cinco grados hacia el exterior y permite diferentes posiciones lounge, mientras la butaca trasera crea un espacio casi privado. La lana de Fox Brothers degradada en tonos damson convive con titanio impreso en 3D y nogal retroiluminado.

El salpicadero actúa como pantalla panorámica solo cuando es necesario; el resto del tiempo deja a la vista la veta natural. En el centro, un módulo analógico-digital, el llamado "Marvel mecánico", demuestra que la casa de Crewe no renuncia al placer táctil ni siquiera en la era de las OTA y la realidad virtual, utilizada para modelar el interior antes de esculpirlo a tamaño real.

Debate de identidad: ¿Jaguar en el espejo?
El Jaguar Type 00 marcó en 2024 un antes y un después, con un frontal minimalista, un diseño totalmente monolítico y un emblema rediseñado que dividió a los puristas, transformándose en un acto de ruptura necesario para relanzar la firma de Coventry. Ahora, buena parte de esa estética aparece en el EXP 15, lo que ha encendido las alarmas entre los aficionados de Bentley.
Un gesto innecesario que podría erosionar la imagen clásica de la marca
Está claro que Jaguar necesitaba reinventarse tras años de malas ventas, mientras que Bentley seguía generando sólidos beneficios. ¿Por qué cambiar, entonces? Para unos, el EXP 15 es una evolución lógica hacia el lujo contemporáneo; para otros, un gesto innecesario que podría erosionar la imagen clásica de la marca. El reto de los estudios de diseño es encontrar un equilibrio: abrazar la electrificación sin renunciar a la majestuosidad que diferencia a Bentley de sus rivales.

Realmente este lenguaje de diseño, o uno muy parecido, ya lo hemos visto anteriormente. Hablamos del mismísimo Rolls Royce Wraith, uno de los modelos de la marca británica más rompedores, con su diseño con proporciones muy audaces, formas monolíticas, pero con una mayor suavidad en las lineas. Y es que parece ser que las marcas británicas están explorando un lenguaje de diseño que, aunque todos parten de un mismo concepto, cada uno lo lleva a su manera, con más angulaciones, más lineas rectas y diseños más minimalistas. ¿Será esto una nueva etapa en el diseño automotriz británico?
Tren motriz y tecnología bajo la piel
Bentley no ha desvelado cifras, pero habla de una plataforma cien por cien eléctrica con tracción integral y autonomía objetivo entre cuatrocientos ochenta y quinientos sesenta kilómetros, el «punto dulce» para su clientela, según Page. La pintura Pallas Gold incluye partículas de aluminio que no interfieren con los radares y facilitan la detección por Lidar, una muestra de cómo el diseño exterior se alinea con la seguridad y la conectividad.

La marca insiste en que no busca récords aerodinámicos, sino presencia y confort a bordo, algo que se aprecia en los gruesos pilares traseros y en los neumáticos de gran perfil. Todo apunta a un primer modelo de producción en 2026 que conservará rasgos clave del concept, como la parrilla luminosa y los materiales sostenibles, pero suavizará la silueta para mejorar la eficiencia.
Mercado y hoja de ruta hacia 2030
Bentley define el EXP 15 como «SUV urbano elevado» y lo sitúa entre el Flying Spur y el Bentayga. Su misión es sondear al mercado antes del primer eléctrico de serie, piedra angular de la neutralidad de carbono prevista para la mitad de la próxima década.

En un escenario donde Rolls-Royce ya comercializa el Spectre y Jaguar planea un GT eléctrico para 2026, la firma de Crewe busca diferenciarse con una mezcla única de herencia artesanal y espectáculo digital. Si el público acepta la propuesta, veremos su influencia en toda la gama, desde la iluminación interactiva hasta los textiles de lana y seda reciclada.
¿Crees que Bentley ha acertado imitando los trazos de Jaguar o debería mantener un rumbo propio? Os leemos.