Panasonic quiere reinventarse cuando cumple 100 años

El hogar, la ciudad y los coches inteligentes son las bases de la transformación de Panasonic, que este año está celebrando su primer siglo.

Sin olvidarse del todo de la electrónica de consumo, Panasonic, que en los últimos años no ha vivido sus mejores momentos, busca identificar los pilares sobre los que puede sustentar su futuro en el hogar y las ciudades inteligentes y en la evolución de los coches eléctricos y autónomos.

En cada uno de estos territorios, el gigante japonés -a pesar de su crisis todavía puede presumir de aglutinar 496 empresas, dar empleo a 274.143 trabajadores, tener más de 90.000 patentes y facturar 61.400 millones de euros- tiene ejemplos que demuestran que no son sólo propósitos sino realidades.

En el hogar inteligente, desde hace un lustro hemos visto sus propuestas en las grandes ferias de electrónica, desde espejos que son capaces de mostrar el estado físico -temperatura, pulsaciones, altura…- o simular el mejor maquillaje, hasta sistemas de aerotermia. Soluciones reales que en algunos casos ya están llegando a la cadena de distribución, mientras otras continúan esperando su momento.

Desde hace años Panasonic experimenta sus equipamientos en Fujisawa, una ciudad inteligente con 1.000 viviendas que albergará a 3.000 habitantes y que contempla, además, otro de los principios de la compañía japonesa: la preocupación por el medio ambiente, la efectividad energética. Lyon, Berlín y el proyecto intermarcas de Tsunashima son otros casos de ciudades inteligentes en las que participa aportando diversas soluciones, como el sistema de farolas inteligentes.

El coche eléctrico y autónomo es otra de las oportunidades. Ahora mismo, Panasonic es líder mundial en fabricación de baterías sin cobalto para automóviles y es el suministrador de estos componentes para Tesla.

Es evidente que estamos en momentos de cambios fundamentales y las industrias japonesas son unas de las que más han sufrido estas crisis de transformación, desde Sony a Panasonic. Solamente el tiempo pude decir si el planteamiento de Matsushita, fundador de Panasonic, es el correcto: planificar a largo plazo y responder a las necesidades de la población. Lo que es más difícil es que se reproduzca un caso de éxito como éste: crear un gigante como Panasonic a partir de un doble conector para una bombilla y un enchufe.

Del tubo al plasma y del plasma al OLED

En esta imagen doble se pueden ver dos modelos de televisor. El primero es un equipo basado en tecnología de tubo del rayos catódicos, es el primer televisor que lanzó Panasonic, en 1952. El otro es un panel OLED.

Precisamente, la llegada del OLED le ha dado un respiro a la compañía japonesa en el área de televisores. Panasonic era líder en televisores de plasma, una tecnología con negros perfectos y muy buen contraste que, sin embargo, no resistió la llegada del LED. La gestión del OLED, sin embargo, necesita controlar cada pixel, algo similar a lo que sucedía con el plasma y en ese terreno Panasonic se siente seguro.