Ericsson se apea del MWC2021

Los organizadores de la gran feria de telefonía de Barcelona han trasladado la tradicional fecha de febrero a junio y han anunciado medidas sanitarias extraordinarias, pero igual no es suficiente.

En España, el Mobile Word Congress (MWC) de Barcelona, el gran encuentro de la industria de las telecomunicaciones, fue la piedra de toque del confinamiento por la Covid-19. Las posturas estaban muy enfrentadas entre los partidarios de que se celebrara y los que veían un peligro en hacerlo. Eran los comienzos de febrero de 2020 y todavía no sabíamos nada de lo que nos esperaba padecer sanitaria, social y económicamente por ese SARS-Cov-2 que comenzaba a extenderse por todo el mundo desde la remota Wuhan, capital de la provincia china de Hubei.

LG fue la primera de las grandes que anunció que no asistiría. Su decisión generó un efecto dominó que llevó a otras grandes a sumarse. Cuando Ericsson comunicó que no asistiría, se acabó todo. Y es que Ericsson, aunque no sea ya fabricante de teléfonos, es uno de los actores fundamentales en el sector, básico para la creación y el mantenimiento de las redes de telecomunicaciones y para el despliegue de la quinta generación de telefonía, sobre la que debería pivotar el ahora más hipotético MWC2021.

Ericsson ha justificado su decisión de no participar en esta feria a pesar de las medidas sanitarias y de prevención que acababa de anunciar la GSMA, la asociación de operadores, fabricantes y proveedores de servicios de telefonía móvil que organiza este congreso mundial: “En vista de los continuos impactos de la covid-19 y nuestra consideración principal hacia nuestra gente, su salud y bienestar, hemos decidido no participar en el MWC 2021″, los mismos motivos que la llevaron el año pasado a ausentarse de la convocatoria.

Tal vez la GSMA ha pecado de optimista a pesar de haber trasladado de febrero a junio la cita prevista para este año y reducir los más de 150.000 visitantes de un año “normal” a 50.000.

Ahora queda esperar para comprobar cómo responde el resto de los grandes, qué harán operadores como Telefónica, Vodafone u Orange. Y qué postura adoptarán los fabricantes de móviles que ya han ido presentando sus terminales y planes en actos virtuales o en el propio Mobile World Congress de Shanghai.

Recupero aquí dos artículos publicados sobre el tema en Innovadores en febrero-marzo del pasado año.

¿Habrá o no habrá MWC este año en Barcelona?

LG no estará, ZTE sí, pero con perfil bajo, se rumorea que ASUS puede ser baja… El MWC es un negocio enorme y la organización mantiene su resolución para celebrarlo adaptándose a lo que diga la OMS

De momento, LG es la única compañía que ha anunciado oficialmente que se retira del Mobile World Congress. Incluso ha cancelado convocatorias de prensa. Sin embargo, se han citado otras empresas. Ayer, se daba por seguro que ZTE se caía del cartel. Y hoy el rumor afectaba a la compañía taiwanesa ASUS.
Si el rumor de LG se confirmó, el de ZTE se ha desmentido, aunque con algún reparo. Sí estarán, pero no reslizarán presentaciones, aunque tendrán expuestos nuevos dispositivos. Un sí estaremos, pero con perfil bajo.
¿Seguirá adelante esta edición del MWC de Barcelona? ¿Cambiará de fecha? De momento, la respuesta a estas dos preguntas es sí a la primera y no a la segunda. La organización del congreso está lanzando a diario mensajes de continuidad y de refuerzo de las medidas de seguridad adaptándose a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y trasladarlo a otra fecha es prácticamente imposible porque rompería el calendario expositivo de Fira de Barcelona, así como las reservas hoteleras y el refuerzo de transportes.
La gran feria de la telefonía móvil es una auténtica bicoca. De hecho, no hay una cita única, sino tres: además de Barcelona está Los Ángeles y Shangai. Este es otro de los motivos por los que un cambio de fecha es prácticamente impensable: la convocatoria de Shangai es para junio y se acercaría mucho. Aunque ¿habrá edición del Mobile World Congress este año en Shangai? Tal y como está evolucionando el coronavirus, una feria internacional en China corre peligro.
Tendemos a ver únicamente la cara exterior de las ferias, el escaparate, los expositores… sin embargo el MWC, como otros encuentros empresariales son fundamentalmente una reunión en torno al negocio. Aquí es donde operadoras y fabricantes de móviles y de redes hacen sus negocios y defienden sus marcas. Estar en el MWC y presentar terminales que convenzan es una campaña de marketing importantísima ante el público objetivo.
Eso por no hablar de los beneficios indirectos que deja en la ciudad y que se calculan en más de los 450 millones de euros. En realidad, nadie quiere que no se celebre el MWC; ni tan siquiera los sindicatos de los sectores que convocan movilizaciones aprovechando la feria: metro, taxis… Sin Mobile no hay posibilidad de amenaza.
Sumemos que los principales desembolsos ya están hechos: el espacio está contratado desde hace un año, se ha pagado a Fira y a la GSMA -el MWC está organizado por la patronal del sectos, la Asociación GSM-, se han reservado los hoteles en Barcelona a precio de oro y ya a estas alturas probablemente también lo estén los billetes de transporte. Podrán recuperar algo gracias a los seguros y evitarán los costes del personal, montaje de expositores…
Entonces, ¿por qué LG ha dado el paso? Más allá de la teoría conspiranoica de que podría ser un globo sonda de la propia GSMA para, lo cierto es que la división de telefonía móvil de LG no ha hecho un buen año; más claramente: ha hecho un mal ejercicio. La filial de comunicaciones, en la que se engloban los móviles, terminó el año con una pérdida operativa de 778,4 millones de euros. Borrarse del Mobile World Congress podría interpretarse como un paso atrás en su estrategia en el negocio de los móviles.
Se da por descontado que el personal que se desplace directamente desde China, base de Huawei, Oppo, OnePlus, Xiaomi, TCL… va a ser mucho menor. El año pasado, el 6% de los asistentes llegaron de China, más de 6.000 de un total de 110.000 visitantes y la presencia asiática mantenía una tendencia al alza. Pero la suspensión de los vuelos con China de las principales líneas aéreas y las restricciones impuestas por el Gobierno chino van a obligar a las firmas a movilizar personal que tengan desplegado en Europa.
La organización por su parte, insiste en su mensaje de calma y de refuerzo de las medidas higiénicas para evitar contagios, en la línea de las recomendaciones de la OMS. La última hace prever un MWC sin apretones de manos y con abundante desinfectante líquido por todas las esquinas.
Pero queda todavía medio mes y puede suceder que la alarma se dispare o disminuya. Lo que diga la OMS será el argumento de las medidas que tome el Mobile World Congress. Lo que sí es seguro es que entre los periodistas del sector tecnológico comienza a hablarse más del coronavirus y del MWC que de las filtraciones del Samsung S20.

Los organizadores quieren asegurar la continuidad del MWC

El sistema de reembolsos por la cancelación de la feria de Barcelona favorece a quienes opten por el sistema de descuentos en las ediciones de 2021, 2022 y 2023.

El 4 de febrero LG comunicaba que no iba a participar en el Mobile World Congress de Barcelona previsto para veinte días más tarde. Fue el primero que dio el paso al frente y originó una cascada de renuncias y, finalmente, la suspensión de la feria.
La salud y el sentido común primaron sobre el negocio, pero la cancelación del MWC ha tenido y tiene repercusiones económicas, entre otras ¿qué iba a suceder con los desembolsos que habían realizado las compañías para participar? ¿Los iban a recuperar? ¿De qué forma?
Finalmente, la GSMA, la patronal internacional del sector de las telecomunicaciones que organiza los MWC, ha desvelado cómo lo va a hacer y, de paso, su apuesta por mantener la convocatoria para otros años
La política de devoluciones establece el retorno del 100% del precio de las entradas (entre los 800 y los 5.000 euros). En el caso de los expositores, los que invirtieron hasta 5.000 libras (la sede central de la organización está en Londres) recuperarán el total en efectivo. A partir de esa cantidad, recuperarán el 50% con un límite máximo de 150.000 libras.
Hay que tener en cuenta que muchos expositores invierten millones tan solo en la contratación del espacio. El MWC es una feria cara, con un precio de 1.200 euros por metro cuadrado. Huawei, con el mayor espacio, sobrepasaba los 10 millones de euros por este concepto y sólo podría recuperar 150.000 libras en efectivo.
Eso si no se dieron de baja antes de que la GSMA decidió echar el cierre a la edición de 2020. Compañías como LG, Sony, Ericsson, Intel, Amazon… que anunciaron su baja previamente no recuperarán su inversión en efectivo. Ni tan siquiera el 50%.
Pero, con la mirada puesta en no dejar que la feria decaiga, los organizadores han abierto otra puerta. Todos los que habían contratado su participación en el MWC de Barcelona 2020 podrán recuperar el 125% de lo invertido en forma de descuentos a lo largo de tres ediciones. En la próxima (2021), el 65%; en la siguiente, el 35%, y en la de 2023, el 25%.
De momento, la GSMA ha comunicado que para el MWC 2021, que se celebrará entre el 1 y el 4 de marzo, cuentan con el “apoyo formal” de grandes operadores de telefonía móvil como NTT Docomo, Orange, Telefónica y Vodafone”.