Oppo es una de esas marcas de móviles chinas que de vez en cuando anuncian que tal trimestre han entrado en el top cinco de marcas más vendidas en cierto país o en determinada área geográfica. También coincide con otras enseñas en su juventud -comenzó a comercializar móviles en 2008- y en su precocidad -en 2016 fue el mayor fabricante de móviles de China-.
Pero además tiene otra característica compartida: BBK Electronics. Es la matriz de OPPO, de Vivo, de OnePlus, de Realme... Y también fabrica reproductores Blu-Ray, relojes inteligentes, auriculares... Es un gigante de la electrónica que se ha colocado, sumando sus marcas, en el top tres de los fabricantes de móviles. Aunque pocos sepan quienes son.
En Oppo (o BBK Electronics) tienen experiencia de fabricación, no son unos advenedizos en esta industria
Este preámbulo puede servir para despejar dudas. Por ejemplo, que en Oppo (o BBK Electronics) tienen experiencia de fabricación, no son unos advenedizos en esta industria. Y también que han sabido abrirse huecos en el mercado. No ha sido un éxito por casualidad.
Diferenciarse
Uno de los puntos clave para poder arañar cuota de mercado en un mundo tan competitivo como el de la telefonía móvil en el que, prácticamente todos los contendientes juegan a combinar de diferentes maneras los mismos componentes fabricados por un puñado de suministradores, es la diferenciación.
Unos optan por las cámaras y las dotan de abanicos interminables de opciones; para otros la apuesta está en la batería; algunos buscan la potencia a tope; los hay que apuntan a todo... Es el caso del Oppo Find X5 Pro, su terminal estrella de este año.
Pantalla AMOLED de 6,7 pulgadas, con refresco de 120 hercios, una densidad de 525 puntos por pulgada y protección a cargo de Corning Gorilla Glass Victus; batería de 5.000 miliamperios con carga rápida SuperVOOC de 80 vatios (inalámbrica de 50 vatios); 12 gigas de RAM; rocesador de Qualcomm, un Snapdragon 8 Gen 1; máxima resistencia al agua y al polvo (IP68)... Pero hay dos puntos que destacan: la cámara y el diseño.
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Ya el diseño del Find X3 sorprendió por su tratamiento del cristal para la trasera. Lograron una curvatura que formaba una especie de cono truncado en el que encajaba el bloque de cámaras. Era distinto a lo que habíamos visto hasta la fecha. En el Find X5 Pro lo han repetido, pero con un material cerámico, en principio más resistente que el cristal, buen disipador del calor y agradable al tacto. No lo he tocado todavía, pero tiene muy buena pinta.
En cuanto a la cámara, a su alianza con Hasselblad para el ajuste de tonos y colores y con Sony para adaptar su sensor IMX766 de 50 MP, se ha sumado el desarrollo de un procesador neural dedicado fundamentalmente al vídeo nocturno.
Cuando se fabrica de esta forma (dicen que en el proceso de producción de las traseras cerámicas invierten 168 horas...) y con estos componentes, se compromete el precio
Lo han bautizado con un nombre que, en castellano, suena un poco raro: MariSilicon X. Con una arquitectura de seis nanómetros, dedica su inteligencia artificial a procesar las imágenes para lograr multiplicar por cuatro la resolución percibida de los vídeos nocturnos minimizando el grano.
Cuando se fabrica de esta forma (dicen que en el proceso de producción de las traseras cerámicas invierten 168 horas...) y con estos componentes, se compromete el precio. El OPPO FindX5 Pro cuesta en el período de precompra (hasta el 14 de marzo) 1.299 euros. Eso sí, trae como regalo el reloj Oppo Watch Free, los auriculares Enco X, una funda protectora y el cargador inalámbrico AirVOOC de 45 vatios.
En el catálogo, este X5 Pro estará acompañado por un X5 y una versión Lite, todos serán 5G.
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