Uno tiene la costumbre, no sé si buena, mala o regular, de leer las reseñas que se van escribiendo sobre equipos electrónicos. La verdad es que mi interés por la evolución de los móviles ha ido disminuyendo. Creo que llevamos unos cuantos años de evolución sin cambios importantes, más allá de los teléfonos flexibles. Por cierto, a pesar de que las estadísticas digan que las ventas van bien, creo que todavía les falta un hervor para convencer de verdad.
Ligero cambio en el formato
Sony utiliza sus Xperia como escaparate de sus tecnologías audiovisuales
Siguiendo esa costumbre, ya había leído alguna crítica sobre el Xperia 1 VI. Y es que los móviles de Sony forman parte del puñado de marcas que me siguen interesando. Ya lo he escrito en otras ocasiones, pero me admira el tesón de Sony por mantener esta línea de negocio cuando fue capaz de cercenar otras como la de ordenadores. Si me interesa especialmente es porque ha elegido un nicho interesado por la fotografía y el cine y utiliza sus Xperia como escaparate de sus tecnologías audiovisuales, tanto en lo que se refiere a la imagen como al sonido.
Por eso me llamó la atención que en la última iteración de su serie 1, el Xperia 1 VI, modificaran un elemento clave: la pantalla de 6,5 pulgadas. Y lo hicieran bajando un escalón importante, pasando de 4K a Full HD + (1080 x 2340 píxeles), además de un ligero cambio en el formato: de los 21:9, la proporción cinematográfica por excelencia, a los raros 19,5:9, algo menos alargado (o apaisado).
El caso es que cuando llegó a mis manos el nuevo buque insignia de la división de móviles de Sony no me llevé las manos a la cabeza diciendo "¿qué han hecho?". Pienso que muy pocos serán capaces de diferenciar la pantalla Full HD + de otra 4K. El nivel de densidad de puntos es tan grande que es muy difícil apreciarla a simple vista. Otra cosa es si se utilizara para visión 3D. Tampoco me ha parecido tan radical el cambio de proporción entre base y altura. Si no tienes delante las dos pantallas no creo que puedas diferenciar de un vistazo cuál es 21:9 y cuál 19,5:9.
Lo que sí me llamó más la atención fue la trasera. ¿Qué material es? ¿Eso es plástico? Desde luego, ni el tacto ni la rugosidad parecen los del cristal. Es una superficie con mucho mejor agarre que el cristal liso o que el metal pulido. Y, sin embargo, es cristal tratado y protegido por Gorilla Glass Victus, al igual que la pantalla. En este último caso, con Victus 2. Para quienes no estén familiarizados con estas tecnologías, es la última versión del protector de pantallas más conocido y que, en teoría, podría proteger la pantalla de roturas en impactos desde dos metros de altura. De cualquier forma, yo no probaría la resistencia con mi propio teléfono, porque depende de dónde impacte. Un golpe pequeño con una punta en un lugar sensible y adiós pantalla.
Cámaras, la joya de la corona
Las cámaras, con el modo Pro integrado en la aplicación de cámara, siguen siendo el principal atractivo de un móvil que (a pesar del retoque en la proporción de altura/base) continúa manteniendo un diseño monolítico. La disposición de las cámaras traseras es en columna: gran angular de 52 megas (48 efectivos), super gran angular de 12 millones de píxeles y tele también de 12 MP. La cámara frontal también cuenta con un sensor de doce megapíxeles.
Las cámaras con también un muestrario de sensores; cuatro cámaras y cuatro sensores diferentes: Exmor T de 1/1,35 pulgadas de tamaño; Exmor RS de 1/3,5"; Exmor RS de 1/2,5" y Exmor RS de 1/2,9 pulgadas.
El sistemas de cámaras, tanto por su hardware como por el software dedicado, hace del Xperia 1 VI una de las opciones favoritas cuando se elige un móvil por las posibilidades avanzadas de cámara. No en vano, Sony es uno de los principales fabricantes de sensores para móvil y ha hecho un esfuerzo brillante durante los últimos años para adaptar el software de gestión de sus cámaras Alfa a los móviles e integrarlo en la aplicación cámara.
Y cuando hablo de cámara no se trata únicamente de fotografía, sino que las bondades se pueden aplicar también al mundo del vídeo. Una imagen vale más que mil palabras, pero ¿qué es de un vídeo sin sonido? Sony es una de las marcas que más ha estado pujando para devolver su importancia al sonido. Lo ha hecho en el mundo de los auriculares, las televisiones y también los móviles. Los Xperia 1 VI ofrecen audio de alta resolución tanto conectados por cable como inalámbricamente. Mantiene el conector de 3,5 milímetros, está certificado 360 Reality Audio, Upmix, Dolby Atmos, altavoces estéreo Full-stage... y es compatible con las mayoría de formatos de grabación y de reproducción.
Rendimiento
Como se trata de un buque insignia, comparte el procesador imprescindible en esta categoría máxima: Qualcomm Snapdragon 8 de tercera generación, apoyado en 12 gigas de memoria RAM y 256 de almacenamiento. La memoria de almacenamiento se puede incrementar con el uso de tarjetas microSDXC hasta un tera y medio. Además, otra de las características que mantiene es que la bandeja en la que se colocan las tarjetas SIM y microSD se puede extraer sin necesidad de utilizar ninguna herramienta.
La batería promete dos días de duración con una capacidad de tope de gama: 5.000 mAh y es compatible con carga rápida (USB PD), carga inalámbrica y carga inversa (se puede ceder energía a otro dispositivo compatible).
Está disponible en tres colores: verde caqui, plata y negro... aunque para mí sobran dos opciones. Evidentemente, tiene que ser negro.
Conclusión
Llegados a este punto queda lo peor, el precio: 1.399 euros. ¿Es mucho? Sí. ¿Está alejado de los precios de otros topes de gama? No. Así están las cosas. El Sony Xperia 1 VI mantiene su enfoque en los entusiastas de la fotografía y el vídeo, con un sistema de cámaras de primer nivel y un rendimiento potente. A pesar de algunos cambios en la pantalla y el diseño, sigue siendo un dispositivo destacado para aquellos que buscan un móvil completo en cuanto a multimedia y rendimiento.