La movilidad eléctrica sigue ganando terreno en España, impulsada por la creciente concienciación medioambiental, los incentivos gubernamentales y los avances tecnológicos. Esta tendencia está transformando especialmente el paisaje urbano de las grandes ciudades, donde cada vez es más habitual ver coches eléctricos e híbridos enchufables circulando por sus calles. Su adopción se ha extendido a un amplio abanico de conductores, desde particulares hasta empresas.
Según la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), hasta el tercer trimestre del año se han vendido un total de 172.376 vehículos electrificados, lo que supone un crecimiento del 98,4% respecto al mismo periodo de 2024 y representa ya el 16,91% del mercado total. Estas cifras consolidan a los coches eléctricos como una alternativa real y viable a los de combustión interna.
Los coches eléctricos están revolucionando el sector de automoción en España, impulsando una transición hacia una movilidad más sostenible y respetuosa con el medioambiente. Su principal ventaja radica en su contribución a la sostenibilidad medioambiental. Al utilizar la energía eléctrica como fuente de propulsión, no emiten ningún tipo de gases nocivos al aire ni a la atmósfera, como ocurre con los vehículos de combustión interna. Esto contribuye a reducir significativamente la huella de carbono y ayuda a combatir el cambio climático y a mejorar la calidad del aire en las ciudades
Además de sus beneficios medioambientales, los coches eléctricos ofrecen ventajas económicas significativas a largo plazo. Aunque su precio inicial puede ser más elevado al de los vehículos de combustión interna, los propietarios se benefician de menores costes de mantenimiento y de un ahorro considerable en combustible, debido a que la electricidad resulta más económica que los combustibles fósiles. A ello se suman incentivos y subvenciones para la compra, así como posibles reducciones en el seguro, lo que convierte a los coches eléctricos en una opción cada vez más atractiva, tanto para el bolsillo como para la sostenibilidad.
El 93 % de los españoles reconoce no tener suficiente conocimiento sobre este tipo de vehículos
Aunque la movilidad eléctrica sigue avanzando y ganando visibilidad, muchos conductores todavía dudan a la hora de dar el salto al coche eléctrico, principalmente por la falta de información. Según el estudio 'Peugeot 2025: Presente y futuro del sector de la automoción', el 93 % de los españoles reconoce no tener suficiente conocimiento sobre este tipo de vehículos. El estudio revela que sigue existiendo numerosas dudas sobre aspectos clave, como la autonomía, que se mantiene como uno de los principales obstáculos a la hora de considerar la compra de un coche eléctrico.
¿Qué es la autonomía de un coche eléctrico?
La autonomía de un coche eléctrico indica la distancia que puede recorrer con la batería completamente cargada antes de necesitar recarga. Los fabricantes suelen especificar la autonomía máxima que puede alcanzar un coche eléctrico en condiciones normales, basada en la capacidad y eficiencia de la batería. Sin embargo, esta cifra puede variar según diversos factores, como el estilo de conducción, las condiciones climáticas, el uso de los sistemas de calefacción y aire acondicionado, las características de la ruta y la carga del vehículo. La autonomía es un factor clave a tener en cuenta al comprar este tipo de vehículos, ya que afecta a todo, desde el desplazamiento diario hasta los viajes largos por carretera.
¿Cómo ha mejorado la autonomía de los coches eléctricos?
La autonomía de los coches eléctricos ha evolucionado a pasos agigantados en la última década gracias a diversos avances tecnológicos. Entre ellos destacan las baterías de iones de litio modernas, con mayor densidad energética; los motores y los inversores más eficientes, que reducen las pérdidas de energía durante la conversión de potencia; los sistemas de calefacción y refrigeración de las baterías, que mantienen temperaturas óptimas incluso en condiciones extremas; y los sofisticados sistemas de gestión de batería, capaces de maximizar el rendimiento sin comprometer su durabilidad. Además, con las baterías de estado sólido en el horizonte y el continuo perfeccionamiento de las tecnologías existentes, la autonomía de los coches eléctricos seguirá aumentando en los próximos años.
Smart #5 alcanza una autonomía de 540 km y permite una carga ultrarrápida 4C
En 2011, smart presentó la tercera generación del Fortwo Electric Drive, un pionero de la movilidad eléctrica con una autonomía de hasta 160 kilómetros. Más de una década después, la evolución tecnológica ha sido notable. Hoy en día, muchos coches eléctricos ofrecen una autonomía que rivaliza con la de los vehículos con motor de combustión interna, brindando una mayor libertad y flexibilidad en la conducción diaria. La propia marca alemana es un buen ejemplo de esta transformación. Su modelo smart #5 alcanza una autonomía de 540 km y permite una carga ultrarrápida 4C, capaz de pasar del 10 al 80 % de la batería en tan solo 18 minutos.
La ansiedad por autonomía
A pesar de los notables avances en las capacidades de los coches eléctricos actuales, la ansiedad por la autonomía (el temor a quedarse sin batería antes de llegar al destino) sigue siendo una barrera psicológica para muchos potenciales compradores. Sin embargo, el aumento de la autonomía de los coches eléctricos, la expansión y mejora de la red de puntos de recarga y la creciente familiaridad de los conductores con este tipo de vehículos están reduciendo progresivamente ese miedo, consolidando un futuro más sostenible.