Bite Away alivia los síntomas de las picaduras y mordeduras de insectos mediante la aplicación local de calor controlado directo sobre la picadura. Siempre que me asomo a algún tema que tenga que ver con salud, procuro guiarme por la máxima de que hay que acudir a especialistas en el asunto. También es verdad que […]
Bite Away alivia los síntomas de las picaduras y mordeduras de insectos mediante la aplicación local de calor controlado directo sobre la picadura.
Siempre que me asomo a algún tema que tenga que ver con salud, procuro guiarme por la máxima de que hay que acudir a especialistas en el asunto. También es verdad que las normas son para no cumplirlas. Esta vez, y prometo que será una excepción, lo he experimentado en piel propia.
Anillo al dedo; hambre y ganas de comer… El caso es que justo cuando me llegó la nota de prensa del Bite Away acababa de recibir mi primera picadura del verano -y este verano dicen los expertos que va a ser fructífero en insectos y, por lo tanto, en sus consecuencias-. Segunda confesión: las picaduras me suelen hacer reacción. Vamos, que me pica un mosquito-araña-lo que sea hoy y dos días después empiezo a tener un habón del tamaño de una cereza de las del valle del Jerte.
Pedí una muestra y al día siguiente, cuando el habón estaba en pleno esplendor, llegó el paquete. Lo cierto es que era bastante escéptico, pero, mira por dónde funcionó. No es que la inflamación desapareciera, pero sí el prurito. Dejó de picar.
Detrás del Bite Away está la farmacéutica alemana Dermapharm -la verdad es que en la nota de prensa aparece como referencia mibeTec, pero no es que haya muchas referencias sobre ella en la web. Desde la propia página del producto conducen a Dermapharm-.
Este equipo se basa en el calor. Es una especie de bolígrafo grande en cuyo extremo hay una superficie cerámica. Apoyamos esa parte cerámica sobre la picadura, seleccionamos el tiempo y esperamos. Se puede optar entre tres o seis segundos y siempre es recomendable comenzar por la primera. El cabezal cerámico alcanza los 51 grados centígrados que, sobre la piel, producen una especie de pinchazo muy soportable.
En caso de necesitar más de una aplicación, el folleto pide que se espere 10 segundos entre ellas y no se deben aplicar más de cinco veces sobre la misma zona en una hora.
Funciona con dos pilas que vienen en la caja del producto y no se basa en ningún elemento químico por lo que prácticamente lo puede utilizar cualquier persona. En Amazon cuesta 32,90 euros y está disponible en farmacias. Espero que no se me olvide meterlo en la maleta.