Dan Ammann, presidente de GM, ha defendido ante los inversores, la oportunidad potencial que tienen por delante. Además, ha señalado que la generación de ingresos de por vida de uno de estos coches autónomos podría estar en los “varios cientos de miles de dólares”, lo que da unas cifras muy superiores a los 30.000 dólares de media que General Motors recolecta a día de hoy por cada vehículo, una cantidad derivada, principalmente, de la venta inicial.
El fabricante estadounidense, que considera los vehículos eléctricos y autónomos como la piedra angular del futuro del transporte, se ha centrado en el lanzamiento de autos autónomos desde la adquisición de la iniciativa Cruise Automation (estimada en mil millones de dólares) a principios de 2016.
Los rivales más fuertes como Waymo y Uber han inyectado miles de millones en la industria, donde cada uno confía en conseguir una ventaja principal que les permita para ser el primero.
"Si continuamos con nuestra tasa de cambio actual, estaremos listos para desplegar esta tecnología, en gran escala, en los entornos más complejos, en 2019", ha dicho Ammann.
El futuro cercano de GM pasa por los coches autónomos
Por otro lado, Ammann ha señalado la seguridad como factor “decisivo” sobre cuándo sacar al conductor del automóvil.
Hasta la fecha, GM había dicho que los vehículos autónomos eran una gran parte de su futuro, pero no había desvelado detalles. Ahora, se esboza de manera amplia su estrategia, en la que los Chevy Bolts autoconducidos podrían fabricarse a gran escala en las plantas existentes de la firma, reduciendo así costes y desplegándose rápidamente en los principales mercados metropolitanos a través de un servicio de transporte para desestabilizar así a los operadores existentes.
Los Chevy Bolts autoconducidos podrían fabricarse a gran escala en las plantas existentes de la firma
"Somos la única compañía que tiene esto bajo un mismo techo", ha defendido la presidenta ejecutiva Mary Barra.
El pasado mes, GM defendía la idea de que el despliegue de los vehículos autónomos será una realidad en “trimestres, no [en] años” y esta semana ha desvelado un prototipo.
Barra ha defendido que los autos sin conductor y la movilidad compartida aumentarán el negocio central de General Motors. Por su parte, Chuck Stevens, director financiero de la firma, ha asegurado que un servicio de taxis autónomos podrá ser “potencialmente más grande que nuestro negocio principal actual, con mejores márgenes”.
Un servicio de taxis autónomos podrá ser “potencialmente más grande que nuestro negocio principal actual, con mejores márgenes”
GM ya ha informado que es demasiado pronto para discutir sobre la posible marca de sus coches sin conductor, por lo que no se sabe si se usará el nombre Cruise o Bolt o ninguno de ellos. Además, GM cuenta con un negocio de carsharing denominado Maven, un nombre que también se plantea como posible marca.
La apuesta de GM por los coches autónomos y eléctricos es fuerte, y de ello da reflejo el plan anunciado a principios de mes donde señalan que esperan vender un millón de vehículos eléctricos al año para 2026.
Si (
No(
