En los próximos dÃas y semanas irán desembarcando en España las propuestas que los fabricantes de televisores mostraron en el Consumer Electronic Show de Las Vegas. Hoy toca hablar de Samsung. Lo más nuevo y potente de Samsung en televisión se llama microLED, es una tecnologÃa que supera el problema de envejecimiento de los paneles […]
En los próximos días y semanas irán desembarcando en España las propuestas que los fabricantes de televisores mostraron en el Consumer Electronic Show de Las Vegas. Hoy toca hablar de Samsung.
Con ustedes, The Wall, 149 pulgadas de una nueva tecnología: microLED y modular.
Lo más nuevo y potente de Samsung en televisión se llama microLED, es una tecnología que supera el problema de envejecimiento de los paneles OLED. Pero, un momento, ¿existe ese problema? Depende de quién cuente la película, sí o no.
LG es el mayor suministrador de paneles OLED para televisores -si no el único-. Ya sean de marca Sony, Panasonic o LG, los paneles de las teles OLED están fabricados por esta última. Hasta ahora tenían una ventaja evidente frente a otras tecnologías: eran prácticamente bidimensionales y daban una excelente calidad con negros absolutos. Desde la competencia se señaló inmediatamente que, al ser orgánicos (eso quiere decir la O de OLED) van degenerando con el uso.
La compañía coreana acepta que la vida útil de los primeros televisores OLED (2013) rondaba las 35.000 horas, frente a más del doble de los LED. Los actuales, dicen, pueden alcanzar las 100.000 horas de vida. ¿Y eso es mucho? Imaginemos que entre televisión, Netflix, HBO, Movistar + las series de y pelis de Vodafone… vemos, exagerando, 5 horas al día la tele: la ecuación es fácil: 100.000 : 5 = 20.000 días, 54 años. Yo firmaba.
Autoluminiscencia
De cualquier forma, el microLED, que presentó Samsung en CES y ha traído al EuroForum de Oporto, termina con la discusión. Al igual que los OLED, los píxeles son autoluminiscentes, por lo que, cuando se apagan el negro es total, generan un brillo, contraste y color excepcionales, pero no los puntos orgánicos y, por lo tanto, no padecen el estigma del envejecimiento prematuro (si son más de 54 años…).
La otra cualidad del microLED es su modularidad. Aunque han mostrado ya un televisor de 75 pulgadas con esta tecnología, el espectáculo se centra en un panel de 149 pulgadas compuesto a su vez por módulos más pequeños que se encajan perfectamente. Esta característica permitiría crear paneles de cualquier tamaño para adaptarse a las necesidades del usuario. Sin embargo, no se puede doblar ni enrollar.
No se sabe ni cuándo llegará de forma comercial ni su precio. Será caro, dicen, todas las tecnologías cuando empiezan lo son, rematan. Pero tampoco se saben los precios de los televisores que van a comenzar a venderse en España en apenas tres semanas.
Serán más de 20 modelos, con televisores QLED 8K entre 65 y 98 pulgadas y QLED 4K de 43 a 82 pulgadas de diagonal. El foco son las grandes pulgadas y los paneles QLED, sin espacio para tamaños por debajo de 32 pulgadas ni HD y con muy poco para el Full HD. De un plumazo, Samsung ha renunciado a vender en prácticamente un 25% del mercado y se centra en producto de valor. De hecho, 4,5 de cada 10 televisores de resolución 4K (Ultra Alta Definición – UHD) vendidos en nuestro país lleva la marca Samsung. Y en el último trimestre de 2018 han vendido más televisores QLED que todos los OLED juntos, según sus propios datos.
75 pulgadas y más
Ultra Alta Definición y gran formato, con un ojo puesto en los televisores de 75 pulgadas y más, porque de 2017 a 2018 se ha duplicado la venta de esta gama y esperan que en 2019 suceda lo mismo: por valor, se facturarán alrededor de 100 millones de euros en teles de 75′ y más, lo que supone un 5% de todo el mercado.
La buena noticia para los consumidores es que el precio va a bajar, incluso se dio la cifra de que podrían llegar a verse etiquetas que marquen 1.500 euros o menos.
La evolución del QLED de 2017 a 2018 fue significativa en el tratamiento de los negros y del color; para este año estaba pendiente la mejora de la visión lateral, algo de lo que podía presumir la competencia, pero que desde Samsung no se comunicaba: ¿desde qué ángulo se puede ver la tele sin que sufra el color y / o el contraste? Este año se han quitado la espina: 174 grados, es decir que no hay que buscar el mejor sitio del sofá para ver el contenido en condiciones. Lo llaman “Ultra Viewing Angle”, como llaman “Direct-Full-Array” a lo que conocíamos como Full LED, es decir, la iluminación procede de toda la parte trasera del televisor y no de uno o dos de los laterales o de la base del panel.
Pero, si no hay contenido 8K, ¿para qué me sirve una tele con esa resolución? ¿Para cuando lo haya? La respuesta de Samsung es un magnífico sistema de escalado de imagen apoyado además en inteligencia artificial. Los QLED de este año aprenden con el uso de forma compartida a través de bancos de imágenes.
“Alexa, enciende la tele…”
“Alexa, baja el volumen…”, “Ok Google, baja el volumen de la tele…”. La compatibilidad de las teles de Samsung con los asistentes de voz de Amazon (Alexa) y de Google (Google Home) va a dar para muy poco en sus compases iniciales. A penas para encender y apagar la tele y manejar el volumen.
No es interoperable, sin embargo con los altavoces Home Pod de Apple, aunque iTunes aparecerá como una app en los televisores de Samsung, sin necesidad de utilizar un Apple TV, y un poco más adelante se podrá compartir contenido desde equipos de la compañía de la manzana mordida a través de Air Play 2.0.
Para especiales
The Frame se camufla perfectamente en la pared como si fuera un cuadro o una fotografía enmarcada. Este año da el salto a la tecnología QLED.
The Frame y The Serif son dos teles diferentes. Se pueden explicar como “la tele para quien no le gusta la tele”. Tienen un diseño especial. El primero, The Frame, se puede camuflar como una gran fotografía enmarcada en una pared y es difícil distinguirla hasta que se enciende como tele.
El segundo, por su parte, podría ser como un concepto de televisor futurista ideado en los años 50, como la tele de “Los supersónicos”, vamos.
Desde que se lanzaron, siempre han ido por detrás en tecnología. Este año, ambas categorías (The Serif es algo testimonial en España más fácil de encontrar en una tienda de diseño que en un canal de gama marrón) reciben paneles QLED y, por tanto, mejoran su calidad de imagen, pero se mantendrán un paso por detrás tecnológicamente que los modelos “normales”.
The Frame, además de su diseño en forma de marco (personalizable también) incluye una gran colección de imágenes que mostrar como si fueran fotografías o cuadros. En esta edición se amplían, en la modalidad de pago -5 euros al mes- se puede disfrutar de todo un museo (o más) con 20.000 obras.
Tras la presentación de Samsung, en un par de semanas, Sony mostrará sus nuevos modelos y también sabremos los precios de estos de Samsung, pero lo interesante cuando se renuevan gamas es ver cómo quedan los modelos del año pasado que no se han vendido.
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