El último miembro de la familia Alexa -hasta la fecha- combina altavoz inteligente con pantalla de 10 pulgadas y un módulo Zigbee para controlar todos los dispositivos inteligentes de la casa.
Para mi gusto no es ni muy bonito ni estilizado, aunque si lo miras de frente da el pego. Desde este punto de vista parece una tablet gruesa con una peana, pero en cuando le das la vuelta descubres que el último miembro de la familia Echo, de Amazon, tiene tanta trasera como uno de esos televisores antiguos. Pero, claro, en algún sitio tenían que meter todo lo que querían equipar en este Show.
Querían que sonara bien y le han metido un juego de altavoces con dos controladores de neodimio de dos pulgadas, radiador pasivo y procesamiento de sonido Dolby; también querían que escuchara bien desde cualquier ángulo y lo han dotado de ocho micrófonos; a la vez se les ocurrió que podría convertirse en el centro del hogar inteligente y han incluido el mismo módulo que lleva el Echo Plus, compatible con Zigbee. Como se llama Show, había que montar una pantalla, diez pulgadas con una resolución comedida: HD (1.280 x 800 píxeles) y ya que una de sus características es hacer videoconferencia (no sólo de Echo a Echo y esto es importante), tiene una cámara de cinco megapíxeles.
Con todo esto dentro, se puede entender que les haya quedado un equipo más bien voluminoso, aunque hay otras aproximaciones similares en el mercado más estilizadas, como el Lenovo Smart Display.
Con el Show vienen además un par de mejoras importantes. En cuanto al propio equipo, ahora se puede controlar por voz y / o navegar por los menús en modo tableta; además, al tener una pantalla de 10 pulgadas, se pueden ver los contenidos en el mismo Show y no sólo pedirlos para consumirlos en otra pantalla. Los menús se han rediseñado para poder mostrarlos, moverse por ellos y seleccionarlos de manera táctil.
En cuanto a las ventajas genéricas, vayan dos por delante, a la espera de poder probarlas sobre un Echo Show (prometido que en breve lo veremos). La primera es una de las importantes. Hasta ahora, el Speaker ID -así es como llaman en Amazon a la huella de voz- no estaba disponible en España. Es un sistema que le permite identificar a cada usuario del equipo por la voz. De esta forma, se podrían regular los permisos para acceder a ciertos contenidos, además de personalizar las agendas, gustos y preferencias.
La segunda es la posibilidad de hacer videoconferencias a través de Skype. Hasta ahora sólo de podían hacer de Echo a Echo o bien utilizando la app del móvil; ahora se pueden realizar entre Echo (en la propia casa también se puede llamar de un Echo a otro) y con cualquier dispositivo con Skype.
El Echo Show cuesta 229,99 euros y se puede encargar desde hoy, miércoles. Las unidades se comenzarán a enviar a partir del próximo 27 de febrero. Está disponible en negro y blanco.