Sin embargo, hay una duda que rodea a estos vehículos y es precisamente el consumo energético que supone cargar un coche de este tipo. Para ello, es necesario emplear electricidad y la cantidad necesaria varía en función de factores como la capacidad de la batería, el nivel de carga deseado y también el tipo de cargador empleado.
Un coche eléctrico consume de media entre 15 y 30 kilovatios-hora (kWh) por cada 100 kilómetros recorrido
Actualmente, un coche eléctrico consume de media entre 15 y 30 kilovatios-hora (kWh) por cada 100 kilómetros recorridos, una cifra que varía en función del modelo y estilo de conducción. Su impacto medioambiental depende directamente de si la electricidad empleada para su carga procede de fuentes renovables o a partir de combustibles fósiles.
Aunque en el último año hemos vivido momentos en los que los precios de la luz se dispararon de forma excepcional, poco a poco el mercado se ha ido estabilizando de nuevo. En cualquier caso, cada vez son más los usuarios que buscan poder controlar el consumo energético que realizan y tratan de aprovechar los momentos en los que el precio de la luz es más barato.
Para ello, la compañía de luz española Chippio ha desarrollado un sistema que denominan Smart Charging y que consiste en un servicio de carga inteligente que automatiza la carga de vehículos eléctricos durante las horas en las que el precio de la luz es más bajo.
Ahorros de hasta el 50% en cada carga de vehículo eléctrico
Los usuarios podrán automatizar la carga de sus coches eléctricos desde la aplicación, ahorrándose hasta el 50% en cada carga
El objetivo de la compañía es ofrecer “luz a precio de mercado” y con esta nueva solución, los usuarios podrán automatizar la carga de sus coches eléctricos desde la aplicación de Chippio, ahorrándose hasta el 50% en cada carga.
Actualmente, recargar un coche eléctrico en España por completo cuesta 18,63 euros de media, según datos de la consultora Switcher, pero con la solución Smart Charging, esta cifra puede rebajarse a la mitad. Para ello, el sistema hace uso de los precios de la luz que la app ya conoce con antelación debido al funcionamiento del mercado eléctrico y permite planificar la carga del vehículo para recargarlo al menor coste posible. Eso sí, respetando el nivel de carga y la hora a la que el usuario quiere tener el vehículo a punto.
Es decir, la funcionalidad permite vincular el vehículo eléctrico a la app de Chippio y seleccionar un límite mínimo y máximo de carga, así como una hora a la que tener el vehículo listo. A partir de ahí, Smart Charging generará un plan de carga para aprovechar las horas de luz más baratas, activando la carga en las ellas, y desactivándola automáticamente en las más caras, pero siempre respetando la hora de finalización indicada por el usuario.
A través de la propia app se puede hacer un seguimiento del estado real de la carga, el consumo y el historial de los coches eléctricos desde la misma app con la que se controla la luz del hogar.
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Disponibilidad y coste
El servicio ya está disponible a través de la app de Chippio, compatible con iOS y Android, y como comentamos, con ella se puede programar el nivel de batería y la hora a la que se necesita que el coche esté listo y el propio sistema se encargará de automatizar el proceso, realizando la carga durante las horas de menor coste.
Para poder utilizar Smart Charging, simplemente hay que ser cliente de Chippio, que tiene un coste de 3,90 euros al mes, sin necesidad de ningún hardware adicional, ya que el servicio es compatible con cualquier tipo de cargador de vehículo eléctrico. Además, el servicio no tiene permanencia.
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