La CE ha abierto una investigación para estudiar la adquisición de la firma de semiconductores NXP por Qualcomm, alegando que puede perjudicar a la libre competencia.
El organismo europeo está preocupado porque esta absorción puede desembocar en precios más alto, menos capacidad de elección y una reducción de la innovación dentro de la industria de los chips. Esta investigación es otra pega más al acuerdo para Qualcomm ya que la negociación está también siendo dura. El próximo 17 de octubre se conocerá la decisión del tribunal.
Problemas de la compra de NXP por Qualcomm
La CE subraya tres problemas fundamentales a la operación: en primer lugar, la compañía resultante estaría en una posición fuerte en los mercados de conectividad, NFC y elementos de seguridad. Además, cree que la nueva empresa tendría la posibilidad y el interés de excluir rivales a través de vinculación y agrupaciones.
Por si esto fuera poco, los políticos del bloque advierten de que está unión dejaría abierta la posibilidad de cambiar las actuales patentes. Esto llevaría a efectos anticompetitivos como aumento del precio de los derechos de patente y exclusión de los competidores.
En tercer lugar, el acuerdo podría eliminar la libre competencia en el sector de los coches conectados, especialmente en la tecnología vehicle-to-everything (V2X), pieza fundamental en el desarrollo de este nuevo campo de estudio.
Importancia de que Qualcomm compre NXP
Pese a todas las trabas, adquirir NXP es importante para Qualcomm ya que le permitirá diversificar su alcance más allá del competitivo mercado de los chips para móviles donde la competencia es dura, sobre todo con la producción propia de semiconductores de algunos fabricantes. NXP le deja abierta la puerta al crecimiento en el mundo del IoT, los coches conectados y la seguridad.
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