Philips trae a España su mascarilla

Refresca el aire y filtra los alérgenos suspendidos. Pero no, no es un elemento anti-Covid ni sustituye a las mascarillas quirúrgicas y menos aún a las FFP2

La Philips Fresh Air Mask ha sido el ‘one more thing‘ de la presentación de Philips España de cara al verano. Hasta que no se ha abierto la caja azul en la que estaba oculta, apenas había habido alguna pregunta. A partir de su aparición en la escena, se han activado las dudas: peso, ¿cuánto tiempo aguantan los filtros? ¿se puede lavar?…

Nos habíamos olvidado de la pregunta fundamental: ¿se puede usar como mascarilla quirúrgica o FFP2? Creo que la respuesta pinchó un poco el globo: NO. No es una mascarilla certificada ni recomendada como protección propia ni ajena frente a la Covid-19.

Entonces, ¿para qué queremos una mascarilla? Pues, prácticamente, para lo mismo que utilizamos un purificador de aire en casa: para respirar aire de mejor calidad. La mascarilla va equipada con un ventilador que aspira el aire y lo recircula a través de un filtro por el interior de ella. El ventilador funciona con un motor eléctrico alimentado por una batería que le da una autonomía de unas dos horas. La carga completa tarde unas tres horas.

Bueno contra las alergias

De esta forma, respiramos aire filtrado y con sensación de frescor. Puede ser muy adecuado para personas alérgicas que hagan deporte al aire libre. Pero, insisto, no equivalen a mascarillas quirúrgicas ni FFP2 ni tampoco está diseñada al estilo de la PuriCare de LG.

La mascarilla completa, con su filtro, pesa 60 gramos y cuesta 89,99 euros. El filtro tiene un uso de unas 200 horas y, si se usa de forma continuada, se recomienda reemplazarlo cada dos semanas. El paquete de cinco filtros cuesta 12,99 euros.

Sin salir de la gama de equipos de purificación de aire, Philips añade a los actuales (Series 800 para habitaciones de unos 50 metros cuadrados y Series 4.000i para espacios de 104 metros y con filtro de carbono para eliminar malos olores) el 3 en 1 Series 2000, un equipo con filtro de aire HEPA y filtro de carbono cuyo cabezal gira 350 grados para difundir aire caliente (resistencias cerámicas) o en modo ventilador. El precio de este nuevo equipo es de 379,99 euros.

También novedades en cafeteras, planchas…

Entre las novedades del año, tocaba la renovación de las cafeteras superautomáticas. Aquí sí que se ha echado de menos la presentación presencial. No es lo mismo que preparen un café a distancia a oler el café recién molido.

La Series 5.400 es una cafetera con el sistema LatteGo: la leche para preparar un capuccino como debe ser se introduce en un vaso que se conecta directamente a la cafetera, sin tubos de por medio. Así se manchan muchos menos elementos. Tiene una infinidad de modos de preparar el café preferido y guarda diferentes perfiles. Es ideal para una casa en la que hay unos cuantos amantes del café o para una oficina pequeña. Cuesta 649,99 euros. Es cara, pero es el tope de gama de la serie. Y dicen los responsables que en un año se puede amortizar la diferencia de precio con un sistema de cápsulas.

Las novedades también han llegado al segmento de planchado con un vaporizador manual plegable y portátil y un nuevo centro de planchado.

Nuevas afeitadoras, secador de pelo y también renovación en las depiladoras por pulsos láser Lumea. En fin, que Philips se prepara para la vuelta al verano.