En general, el 17% de los ordenadores europeos no tiene ningún antivirus, o bien, el software de seguridad habría sido instalado pero desactivado. La empresa de lucha contra los virus informáticos advierte que el mayor de los peligros de quienes se conectan a la red de esa forma es el robo de identidad y la consecuente pérdida de datos, amén de su contribución pasiva a la distribución de programas maliciosos y virus.
El informe también señala que un gran número de ordenadores presentaba el antivirus desactualizado, deshabilitado o había caducado.
McAfee alerta que al menos uno de cada seis ordenadores personales no tienen ningún tipo de protección, situación en donde los finlandeses dan el ejemplo con 90,3% de usuarios protegidos y 9,7% de desprotegidos, siendo el país con la mayor tasa de precaución de Europa. Singapur cosecha un índice peor que el español, 21,75% de usuarios que no utilizan un software de seguridad.