La compañía comenzó una investigación tras una queja de una asociación de trabajadores de China, que pedía su eliminación del proceso para aumentar la seguridad en el trabajo.
El benzeno está conectado con la leucemia, y el hexano puede producir daños en los nervios. Ante esto, Apple ha declarado que, a pesar de todo, no ha encontrado ningún indicio de peligro en ninguno de su medio millón de trabajadores de la asamblea. A pesar de ello, la compañía ya se ha puesto en marcha para retirar estos componentes.