TP-LINK, fabricante de productos de networking para consumo y empresas, ha presentado los resultados económicos del año 2014 en España y a nivel global (2.000 millones de dólares de facturación). Las cifras registradas durante estos doce meses señalan un crecimiento del 53% en la facturación de la compañía, que ha pasado de los 13,6 millones de euros en 2013 a los casi 21 millones de euros el pasado año, además, se ha revelado el objetivo para 2015, aumentar la facturación un 30%.
Este ritmo tan escalable de TP-Link (lleva dos años seguidos creciendo más de un 40%) tiene su origen en tres pilares: la calidad del servicio, los precios de venta y la ventaja competitiva de tener fábrica. Para Kevin Wang, country manager de la marca en Iberia (y que chapurrea español), estas son las diferencias con la competencia. “Sin duda, el hecho de ser nosotros los propios fabricantes de nuestros productos abarata los costes manteniendo una calidad vigilada por nosotros mismos. Esto nos diferencia de los competidores directos que no pueden llegar a nuestros precios competitivos”, afirmaba el directivo.
Alvaro Ausín, director de distribución, ha detallado a los asistentes algunos aspectos de la situación de TP-Link en España. Uno de las cosas que más llama la atención es la posición dominante del fabricante chino. Como podemos ver en la imagen debajo, TP-Link duplica la cuota de mercado de la suma de los dos principales competidores, que por razones obvias no han querido citar.
Por segmentos de mercado, SOHO sigue siendo el territorio en el que la marca es referencia y cada año con más diferencia respecto a la competencia, según datos aportados por Context, TP-LINK ha sido durante el pasado año una vez más la empresa líder en el mercado retail, tanto en número de unidades vendidas como en términos de facturación, gracias entre otros factores, a la presencia consolidada de la marca en este canal. De hecho, el pasado año, TP-LINK consiguió entrar en el segmento de electrónica de consumo a través del acuerdo con Segesa.
Una de las tareas de Paloma Barrios, que se encarga de los proveedores de servicios, es la de intentar llegar a acuerdos con operadores para firmar pactos de exclusividad con ellos. Para que, por ejemplo, si Telefónica te da un router este sea de TP-Link, esto se consigue a través de subastas públicas que llevan un proceso lento, hay radica un gran volumen de negocio. Otras de las estrategias para llegar a aumentar un 30% este año (objetivo de la empresa) es centrar la venta de accesorios, como cargadores y quién sabe si algún smartphone en un futuro no muy lejano (en China ya hay uno a la venta).
Los PLC, especialmente en los dispositivos Powerline con tecnología Wi-Fi, representan ya el 56% de las ventas totales de este tipo de producto en TP-LINK España. En 2014 TP-LINK registró unas ventas de PLCs superiores a los 5,9 millones de euros frente a los 2,7 millones de euros que comercializó en 2013. Además, TP-LINK ha hecho de España un país estratégico para la marca, desde que aterrizara en nuestro país, TP-LINK ha trabajado por crear un fuerte canal de distribución, al que se ha sumado en el último año Tech Data; y una estructura propia que, hoy por hoy, ya cuenta con dos oficinas en España: una, en Madrid y otra, en Barcelona.
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