Nokia ha tenido una pérdida neta de 513 millones de euros en este primer trimestre de año, un resultado muy diferente a los 177 millones de beneficios que obtuvo en el mismo periodo de 2015.
La compra de Alcatel-Lucent es el factor principal de estos resultados ya que el gigante Nokia Corporation tiene que reajustarse antes de empezar su prometedora andadura como proveedor de redes y gestor de patentes.
Si hablamos de beneficio bruto, la finlandesa llegó a 1.554 millones de euros, un 31% más en términos interanuales, pero el fuerte aumento de los gastos tras adquirir Alcatel generó una pérdida operativa de 712 millones de euros, frente a los 228 millones de ganancia del primer trimestre de 2015.
Entre los asuntos pendientes de la compañía está la reestructuración de su plantilla.
Crece en Latinoamérica
La única zona geográfica en la que Nokia aumentó sus ventas en este trimestre fue Latinoamérica, donde su facturación creció un 6% interanual comparada con la de Nokia/Alcatel, hasta los 340 millones de euros.
En cambio, disminuyó un 17% en Norteamérica, su mayor mercado actualmente (hasta 1.582 millones de euros), un 11% en Oriente Medio y África (393 millones), un 5% en China (572 millones) y un 3 % en Europa (1.203 millones).
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