La decisión de este tribunal surcoreano llega en momentos en los cuales los dos colosos intentan demostrar su supremacía y buscan a toda costa que se impida la venta de los productos que supuestamente representan una copia a sus propios diseños.
En Estados Unidos continúa la pugna entre ambas empresas por las patentes que Apple le demanda a la surcoreana. Justamente el tribunal que ha fallado esta semana a favor de Samsung, ha advertido de que "hay muchas similitudes en el diseño exterior entre el iPhone y el Galaxy S, como sus esquinas redondeadas y la gran pantalla , pero estas similitudes habían sido documentadas en productos anteriores", motivo por el cual no hay una sanción firme.
El tribunal también alega que "dado que los cambios que se pueden hacer en los productos móviles de pantalla táctil en general son muy limitados y que el demandado (Samsung) diferenció sus productos con tres botones en el frontal y adoptó diseños distintos en la cámara y en el lateral, los dos productos tienen un aspecto diferente".
El juez surcoreano ha evidenciado algo que cualquier consumidor podría haber advertido: nadie podría confundir un Samsung Galaxt S con un iPhone, porque son visiblemente diferentes. Además los consumidores saben diferenciar el sistema operativo, la marca y el precio de ambos equipos.
Apple sale perdiendo
En esta pugna liberada en territorio asiático Apple ha salido perdiendo. El tribunal falló que la empresa estadounidense infringió dos patentes de tecnología inalámbrica de Samsung, por lo cual debe pagar unos 28.000 euros. Mientras la empresa de la casa deberá pagar una multa inferior por violar una patente relacionada con la llamada función de "choque y rebote" al leer documentos electrónicos.
Las indemnizaciones en este país asiático son bajas porque el tamaño del mercado, cuestión totalmente diferente en territorio estadounidense y europeo, en donde varios litigios se encuentran a la espera de ser resueltos.
Si (
No(
